Название: El arte de educar jugando
Автор: Silvia Álava
Издательство: Bookwire
Жанр: Сделай Сам
Серия: Tu vida en positivo
isbn: 9788412361681
isbn:
A pesar de que la atención puede variar de un momento a otro, esta oscilación se produce dentro de unos límites propios para cada niño.
Algunos tendrán tendencia a atender mejor que otros y a ejercer un mejor autocontrol, pese a ligeras variaciones concretas, debido a factores biológicos y ambientales. En este sentido, niveles muy bajos de atención en niños pueden ir asociados a dificultades emocionales, trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad/impulsividad (TDAH) o retraso madurativo en el desarrollo. Se sabe que el lóbulo frontal del cerebro de los niños con TDAH es diferente funcionalmente al de otros que no tienen este problema.
La atención se ha clasificado en tres tipos: atención selectiva, atención sostenida y control atencional.
La buena noticia, ahora que sabemos lo que es la atención y la capacidad para prestar atención, es que es posible ayudar a los niños a adquirir autocontrol y a prestar atención.
¿Por qué es importante mejorar la capacidad para prestar atención?
La atención es la ventana al mundo. Atender es el proceso cognitivo más básico que nos permite percibir y registrar la información que captamos por los sentidos de la vista y el oído. Atender es el primer paso para el aprendizaje, porque si no atendemos, no podemos adquirir conocimientos nuevos ni generar asociaciones entre conceptos nuevos y los que ya tenemos consolidados.
Asimismo, atender es necesario para memorizar; si no prestamos atención a algo, no lo registraremos y consecuentemente no podremos recordarlo tiempo después. La atención nos permite percibir de forma consciente el mundo que nos rodea. Por todo ello, parece más que obvio que es importante que seamos capaces de prestar atención cuando lo deseemos y que resulta relevante que los niños sean capaces de regularla.
Por otro lado, la falta de autocontrol que experimentan algunos niños no solo se manifiesta en dificultades para prestar atención, sino que en algunos casos va unido a movimientos excesivos, descontrolados e impulsivos. Cuando los niños no están atentos en clase cometen errores en los ejercicios, no les da tiempo a terminar las tareas, no anotan u olvidan los deberes que les mandan para casa o no se enteran de si hay un examen al día siguiente. La consecuencia es que se pueden quedar atrás en los conceptos explicados y pueden aparecer dificultades escolares. Por tanto, es conveniente enseñarles a prestar atención porque indirectamente facilitaremos su aprendizaje en el colegio.
A nivel social, la falta de autocontrol en los niños les puede llevar a no respetar el turno de palabra en el aula, a interrumpir al profesor o a molestar a sus compañeros. Saber escuchar a sus amigos y mantener la calma en los juegos les ayudará en su relación con otros niños5. Los pequeños también pueden inquietarse a la hora de cumplir con las tareas de casa que requieren estar parados o tener paciencia, como, por ejemplo, mantenerse sentados en la mesa durante la comida o hacer los deberes. En estos casos, ayudarles a que desarrollen la capacidad de autocontrol frente a dejarse llevar por lo que les resulta atractivo, interesante o gratificante facilitará el cumplimiento de normas en casa y la adquisición de responsabilidades y autonomía6.
Por otro lado, si el niño no tiene un buen control de sus acciones, es más fácil que cuando experimente emociones intensas se deje llevar por ellas actuando de forma impulsiva e inapropiada. Por ejemplo, pegando o insultando a otros si se enfada mucho. En el capítulo «Desarrolla su Inteligencia Emocional» encontraréis juegos específicos para enseñar a canalizar y gestionar adecuadamente las emociones7.
Ejercicios, actividades y juegos para mejorar la capacidad de prestar atención
A continuación abordaremos qué capacidad para prestar atención tienen los niños según la edad y a proponer ejercicios concretos que ayudan a desarrollar el autocontrol y la capacidad de prestar atención según su etapa evolutiva. Además, se proponen ejercicios para estimular cada uno de los tres tipos de atención: atención selectiva, atención sostenida y control atencional.
De 0 a 3 años
En esta etapa la atención es principalmente involuntaria, es decir, los niños tienen poca capacidad para prestar atención durante un tiempo sostenido a algo concreto. Se considera que a partir de los 2 años son capaces de prestar atención durante unos cinco o siete minutos. Este es el tiempo durante el cual se les puede entretener haciendo una misma tarea sin que se agoten, y después necesitarán cambiar de actividad. A continuación se presentan algunos juegos que son apropiados para el desarrollo de la atención en el periodo de 0 a 3 años.
¡Lo bueno se hace esperar!
Para qué. Para empezar a desarrollar autocontrol, ya que es fundamental que el niño aprenda a demorar obtener lo que le gusta. Si le enseñamos desde pequeño a esperar un poco antes de conseguir aquello que desea, le estaremos enseñando a que según crezca comience a tener autocontrol y sepa esperar.