Mi camino: El camino de las nubes blancas. Osho
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Название: Mi camino: El camino de las nubes blancas

Автор: Osho

Издательство: Bookwire

Жанр: Сделай Сам

Серия:

isbn: 9786074572919

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СКАЧАТЬ Si a la causa le sigue el efecto, el efecto le seguirá nuevamente la causa. Esta es la cadena. Entonces se convertirá en un círculo, comenzad a partir de cualquier punto, provocad la causa o el efecto. Y os digo que es más fácil provocar el efecto porque el efecto depende totalmente de vosotros; quizás la causa no dependa tanto de vosotros. Si yo digo que sólo puedo ser feliz cuando cierto amigo está presente, entonces la felicidad dependerá de cierto amigo, ya sea que esté o no presente. Si yo digo que no puedo ser feliz hasta que adquiera esta enorme riqueza, entonces la felicidad dependerá de todo el mundo, de la situación económica y de todo. Quizás no suceda y, por lo tanto, no puedo ser feliz.

      La causa está fuera de mí, el efecto está dentro de mí. La causa se encuentra en lo que está alrededor, en las circunstancias —la causa está en el exterior—. Yo soy el efecto. Si puedo provocar el efecto, la causa le seguirá. Elegid la felicidad —eso significa que estaréis eligiendo el efecto—, y entonces observad lo que sucede. Elegid el éxtasis, y observad lo que sucede. Elegid ser dichosos y observad lo que sucede. De inmediato toda vuestra vida cambiará y veréis milagros sucediendo a vuestro alrededor, porque ahora vosotros habéis provocado el efecto y las causas tendrán que seguir.

      Esto parecerá algo mágico; incluso puedes llamarlo la ley de la magia. La primera es la ley de la ciencia y la segunda es la ley de la magia. La religión es magia y tú puedes ser el mago. Eso es lo que te estoy enseñando: a ser el mago, a conocer el secreto de la magia. Inténtalo. Has estado intentando lo otro toda tu vida —no sólo en esta sino también en muchas otras vidas—. Ahora escúchame. Prueba esta fórmula mágica, este mantra que te doy. Provoca el efecto y observa lo que sucede. De inmediato las causas te rodearán, seguirán. No esperes a las causas; ya has esperado suficiente. Elige la felicidad y serás feliz.

      ¿Cuál es el problema? ¿Por qué no puedes elegir? ¿Por qué no puedes trabajar en esta ley? Porque tu mente, toda la mente que ha sido aleccionada por el pensamiento científico dice que si no eres feliz e intentas serlo, sólo será una actuación, no será real. Esto es lo que dice el pensamiento científico: que eso no será real, sólo estarás actuando. Sin embargo, no lo sabes. La energía vital tiene sus propias maneras de trabajar. Si puedes actuar totalmente, esto se convertirá en la realidad. Lo único es que el actor no debe estar ahí. Muévete plenamente en ella y entonces no habrá diferencia. Si estás actuando sin entusiasmo, entonces seguirá siendo artificial.

      Si te digo: “Baila, canta y sé dichoso”, y tú lo intentas sin entusiasmo tan sólo para ver qué sucede y permaneces fuera y sigues pensando: “Esto es sólo artificial. Lo estoy intentando pero no llega, no es espontáneo”; entonces seguirá siendo una actuación, una pérdida de tiempo.

      Si lo intentas, entonces inténtalo con entusiasmo. No ocultes nada, muévete hacia ella, conviértete en la actuación, funde al actor con la actuación y entonces observa lo que sucede. Se convertirá en lo real y, entonces, sentirás que es espontáneo. Tú no has hecho nada; entonces sabrás que ha sucedido. Pero a menos que seas total, esto no podrá suceder. Provoca el efecto, entra en él por completo, ve y observa los resultados.

      Puedo haceros reyes sin reino, sólo debéis actuar como reyes y actuar de manera tan total, que ante vosotros aparecerá un verdadero rey como si sólo estuviera actuando. Y cuando toda la energía se haya introducido en la actuación, ¡se habrá convertido en la realidad! La energía hace real cualquier cosa. Si vosotros esperáis por los reinos, éstos nunca vendrán. Aun para un Napoleón, para un Alejandro, que tenían grandes reinos, éstos nunca llegaron. Siguieron siendo desdichados porque nunca lograron comprender la segunda y más fundamental ley de la vida. Alejandro estaba tratando de crear un reino más grande y, entonces, no le quedó tiempo para ser rey. Murió antes de que el reino se completara.

      Esto le ha sucedido a muchos. El reino nunca podrá ser completado. El mundo es infinito, tu reino seguramente seguirá siendo parcial. Con un reino parcial, ¿cómo puedes ser un rey absoluto? Tu reino seguramente estará limitado, y con un reino limitado, ¿cómo puedes ser el emperador? Es imposible. Sin embargo, tú puedes ser el emperador. Tan solo provoca el efecto.

      Swami Ram, uno de los místicos del siglo XX, viajó a América. Se llamaba a sí mismo Badshah Ram —Emperador Ram— ¡y era un pordiosero! Alguien le dijo: “Eres sólo un pordiosero, sin embargo, sigues llamándote a ti mismo el emperador”.

      Entonces Ram dijo: “No mires mis pertenencias, mírame a mí”.

      Y tenía razón, porque si miras las pertenencias, entonces todo el mundo es un pordiosero, incluso un emperador. Puede ser un pordiosero mayor, eso es todo. Cuando Ram dijo, “¡Mírame!”, en ese momento Ram era el emperador. Si observabas bien, el emperador estaba ahí.

      Provoca el efecto, conviértete en el emperador, sé un mago a partir de este preciso momento porque no hay necesidad de esperar. Uno debe esperar en caso de que el reino llegue primero. Si la causa ha de ser provocada primero, entonces uno debe esperar, esperar, esperar y posponer. No hay necesidad de esperar a provocar el efecto. Puedes ser el emperador a partir de este preciso momento.

      Cuando digo: “¡Sé! Sólo sé el emperador y observa”, el reino le sigue. Yo lo he sabido por experiencia propia. No te estoy hablando de una teoría o de una doctrina. Sé feliz y en la cúspide de la felicidad, verás que el mundo está feliz contigo.

      Hay un viejo proverbio que dice: “Solloza y sollozarás solo; ríe y el mundo reirá contigo”. Incluso los árboles, las rocas, la arena, las nubes... si puedes provocar el efecto y ser extático, todos bailarán contigo. Entonces toda la existencia se convertirá en un baile, en una celebración. Pero depende de ti, si puedes provocar el efecto. Y te digo que tú puedes provocarlo. Es la cosa más fácil posible. Parece algo difícil porque aún no lo has intentado. ¡Inténtalo!

      ESCUCHAMOS LO QUE DICES, PERO NOSOTROS EN OCCIDENTE CONSERVAMOS LA INFORMACIÓN EN NUESTRA CABEZA. ¿CÓMO PODEMOS SALIR DE NUESTRA CABEZA? ¿QUÉ MÉTODOS PODEMOS USAR Y ACASO LA FUERZA DE VOLUNTAD PUEDE AYUDARNOS?

      No, la fuerza de voluntad no te ayudará. La fuerza de voluntad no es ningún poder porque la voluntad depende del ego —un diminuto fenómeno que no puede crear poder—. Si no tienes voluntad, entonces eres poderoso porque entonces eres uno con el todo.

      En el fondo, la fuerza de voluntad es una especie de impotencia. Al ocultar el hecho de que somos impotentes, creamos la voluntad. Creamos lo opuesto para engañarnos a nosotros mismos y a los demás. Las personas que se sienten estúpidas, intentan mostrar que son sabias. Constantemente están conscientes de que son estúpidas, así que hacen todo lo posible por parecer sabias. Las personas que son feas o que se sienten feas, siempre tratan de embellecerse, incluso una belleza pintada, sólo un rostro, una máscara. Las personas que son débiles siempre tratan de parecer fuertes. Se crea lo opuesto; esa es la única manera de ocultar la realidad interior. Un Hitler es una criatura débil, por eso es que crea tanta fuerza de voluntad a su alrededor, sólo para ocultar el hecho. Una persona que es realmente fuerte, no será consciente de que lo es. La fortaleza fluirá, estará ahí, pero ni siquiera estará consciente de ella.

      Lao Tsé dice: “Un hombre de verdadera virtud nunca sabe que es virtuoso. Un hombre que es realmente íntegro nunca está consciente de que es íntegro. Pero un hombre que está consciente de que es íntegro, tiene la inmoralidad escondida en lo más profundo”. Un hombre que piensa que es bondadoso, santo y sabio, es un pecador, ¡y lo sabe! Y sólo para ocultar el hecho, crea lo opuesto.

      La fuerza de voluntad no es en realidad un poder sino una debilidad. Un hombre realmente poderoso, carece de voluntad propia, el todo es su voluntad. Flota como una nube blanca, es uno con la existencia y está a tono con ella. Tu СКАЧАТЬ