Fundamentos teóricos e históricos de la dirección y la actuación escénicas. Rolando Hernández Jaime
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СКАЧАТЬ con el actor y de armonizar en su creación los resultados técnico-artísticos de los demás participantes en el proceso de puesta en escena.

      En el trabajo del actor se reúnen los dos componentes o recursos fundamentales del teatro:

      la acción y la ejecución de dicha acción.

      La acción se hace en un hecho concreto solo cuando el actor la ejecuta. Por lo tanto, en la conducción del trabajo del actor y la acción dramática que él materializa se centra la función fundamental del arte de la dirección escénica.

      1.1.7 El público, componente creador del teatro

      En el teatro, el público no es un simple espectador de la obra de arte, sino un ente dinámico en el proceso de interacción que con él se produce en el momento en que el espectáculo se está desarrollando. En esta manifestación artística, el papel del público tiene una magnitud que no se llega a apreciar en ninguna de las demás artes, pues el público no es solo aquel para quien se realiza la obra artística, no es un simple consumidor del producto artístico, sino un elemento activo en la concreción final de la obra.

      El espectador de un cuadro, una obra literaria o una película puede aceptarlas con agrado o con disgusto, y la obra artística no sufrirá ninguna alteración por ello; en el teatro no sucede lo mismo, pues en él el hecho artístico se desarrollará mejor o peor según como el público se comporte. Me referiré a dos casos extremos en que esto se puede producir: si el público ríe en un momento en que lo reflejado en la escena se trabajó de forma muy seria y dramática, o si, por el contrario, calla cuando todo fue trabajado con la intención expresa de producir risa, el actor no se comportará de la manera prevista en lo sucesivo.

      Entre estas dos situaciones opuestas hay una multitud de variantes en que el comportamiento del público influye de manera directa en el resultado de lo que ocurre en la escena, por lo que la participación del mismo es, de hecho, parte del fenómeno activo que constituye la representación de un espectáculo teatral. El teatro es un hecho vivo que adquiere su dimensión final ante la vista del espectador, pues es el único arte en que el público y el artista se miran mutuamente a la cara y se comunican de manera directa sus sentimientos durante la realización de la obra artística.

      Sea cual sea el estilo o formato de la representación teatral, cada una de sus funciones es una obra artística en sí misma, pues, como acto ejecutado por seres vivos que representan situaciones, hechos y sentimientos tomados de la vida real y que por tanto se intercomunican con los espectadores, en cada ocasión la ejecución de la obra artística es diferente, precisamente por la interrelación con los disímiles públicos a los que se presenta.

      Como todo amante del teatro conoce y como se aprecia en los principios expuestos hasta aquí, el teatro es un arte complejo, con múltiples ramificaciones conceptuales, estéticas y técnicas, a partir de las cuales se crea una forma de ver, interpretar, recrear y enriquecer la vida.

      Como dijera el destacado teatrista francés Louis Jouvet (1887-1951), en su artículo “La profesión del director”, el teatro significa “Realizar lo corporal por medio de lo espiritual. Es una manera de actuar con una obra, con los lugares y los ornamentos de que se dispone para montarla, con los intérpretes que la representarán y con el poeta que la ha concebido­­ y finalmente, con el público al que se encuentra destinada” (en Ceballos, 1992: 58).

      Solo de la combinación perfectamente equilibrada de los elementos aquí enunciados, puede lograrse un verdadero espectáculo teatral. En la articulación de todos los componentes que se relacionan con cada uno de estos principios generales está la única fórmula posible para la producción exitosa del milagro que tiene lugar en cada representación escénica. Por ello afirmo que la actividad del director de teatro dramático debe basarse en el dominio absoluto, tanto en la teoría como en la práctica, de las leyes que rigen estos principios.

      1.2 Principios básicos de la dirección escénica

      1.2.1 La dirección escénica y el director: conceptos y definiciones

      ¿Cómo definir el arte de la dirección escénica? Existen muchos intentos por precisar en qué consiste esta heterogénea profesión, la más joven del universo teatral. Algunas definiciones son más precisas que otras, pero en la mayoría de los casos resultan muy generales o insuficientes para abarcar todas las dimensiones de este oficio. Incluso, muchas veces se identifica esta noción con la de “director artístico”, pero esta última es una profesión más amplia, que se refiere a los directores de espectáculos que incluyen varias artes, en los que cada unidad artística ya está hecha, entonces la función del director artístico es integrarlas técnicamente al espectáculo general. La definición de director artístico también se emplea de manera genérica para referirse a todos los directores de las diferentes manifestaciones artísticas.

      En esta discusión sobre funciones y definiciones en el campo de actividad del director, interviene un elemento de primordial importancia: el concepto de “puesta en escena” (mise en scène), que define la función más general del director. La dirección escénica consiste precisamente en realizar la puesta en escena; con esta definición se enuncia la actividad que se lleva a cabo durante el acto de dirigir. Encontramos, entonces, que al hablar de la función del director, en unas ocasiones se emplea el término “puesta en escena” y, en otras, “dirección escénica”. Ambas definiciones son relativamente modernas, pues surgen en la segunda mitad del siglo xix, cuando el trabajo del director adquirió la categoría de un arte con vida propia.

      El término “dirección escénica” define la función, y “puesta en escena” define la actividad que se ejecuta durante el cumplimiento de esa función; por tanto, ambas nociones son complementarias, pues una se refiere a lo general y la otra a lo particular del mismo fenómeno: la conducción y la realización de un espectáculo teatral. Por eso, cuando en una exposición teórica o en el programa de mano de un espectáculo encontramos la expresión “dirección y puesta en escena”, estamos ante una formulación redundante, pues ambas definiciones significan lo mismo.

      Existen, igualmente, dos términos que se utilizan como sinónimos de los anteriores: “montaje” y “escenificación”, que son más recientes, sobre todo el segundo. Por último, hay otro vocablo para referirse al director de teatro, también surgido en Europa a finales del siglo xix, utilizado todavía por varios países y que sería muy saludable generalizar, pues con una sola palabra ya se define al director de teatro, diferenciándolo nominalmente de los demás directores artísticos: regisseur, en francés, y regiser, en español, que viene del antiguo organizador del espectáculo teatral nombrado “regidor”. En Cuba, algunos usan la expresión para señalar al director o maestro de ballet.

      Como muestra de definiciones conceptuales de “puesta en escena”, cito:

      En una acepción restringida, el término puesta en escena designa la actividad que consiste en la disposición, en cierto tiempo y en cierto espacio de actuación, de los diferentes elementos de interpretación escénica de una obra dramática. (Veinstein, 1992: 617).

      La puesta en relieve (puesta en escena) sería algo como aspirar una realidad para espirar otra después de haberse realizado el intercambio gaseoso. (Martínez, 2002: 6).

      En una interpretación sobre la actividad del regisseur, como se le llamó desde aquella época, Jouvet, en sus Reflexiones de un comediante (2002: 57), describe así su función: “Jardinero de los espíritus, doctor de los sentimientos, cronometrista de las palabras, partero de lo inarticulado, ingeniero de la imaginación, cocinero de los discursos, director de las almas, rey del teatro y sirviente del escenario, malabarista, mago y piedra de toque del público”.

      Finalmente, una de las definiciones más acertadas СКАЧАТЬ