Las almas rotas. Patricia Gibney
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Название: Las almas rotas

Автор: Patricia Gibney

Издательство: Bookwire

Жанр: Языкознание

Серия: Lottie Parker

isbn: 9788418216077

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СКАЧАТЬ en las carreteras heladas; le había pedido que le enviara un mensaje cuando llegase.

      La dirección que tenía de Ryan Slevin era una casa adosada perteneciente a la familia Bannon. La habían informado de que Zoe Bannon era la hermana de Ryan.

      Kirby se paseaba por el camino, con su redondo rostro sonrosado por el esfuerzo.

      —Odio dar malas noticias —sentenció.

      —Es parte del trabajo —le recordó Lottie.

      Se escucharon los gritos de los niños antes de que se abriera la puerta, y les llegó un penetrante aroma a ajo.

      La inspectora le enseñó la placa al hombre que se encontraba de pie frente a ella.

      —Hola, ¿es usted Ryan Slevin?

      —Así es. ¿He hecho algo que no sepa? —El rostro del hombre se iluminó con una sonrisa divertida y Lottie se fijó en que tenía una mancha de harina en el pómulo bajo el ojo. Tuvo que resistir la tentación de mojarse el dedo y limpiársela. Pese a su altura, constitución y barba, y aunque Lottie sospechaba que debía de estar en la treintena, Ryan Slevin tenía un aire adolescente.

      —¿Podemos entrar, por favor?

      —Debe de ser algo serio. —Lottie oyó un deje pícaro en su voz. Alrededor de las piernas del hombre aparecieron tres cabezas pelirrojas.

      —¿Quién es? —preguntó el más alto.

      —Calla, Tommy. Vengan por aquí, por favor.

      Una mujer apareció mientras se desataba un delantal sucio y apartó a los niños del camino.

      —¿Qué sucede?

      —Soy la inspectora Lottie Parker, y este es mi colega, el detective Larry Kirby.

      Lottie avanzó esquivando a los niños y a su madre y siguió a Ryan hasta un salón que parecía una zona de juegos.

      Había juguetes desparramados por todas partes y unos ruidosos dibujos animados atronaban desde el televisor. Los niños se marcharon con su madre y Ryan recogió los juguetes, los dejó en una pila junto al televisor y lo apagó.

      Se sentó en un sillón desvencijado. Lottie se apoyó en el borde del sofá, y Kirby se hundió entre los harapientos cojines junto a ella.

      —Bien, ¿qué querían de mí? —inquirió Ryan.

      —Me temo que tenemos malas noticias, señor Slevin —dijo Lottie.

      —Llámeme Ryan. ¿Qué malas noticias? —El hombre se removió inquieto y se enderezó.

      —Está prometido con Fiona Heffernan, ¿es eso correcto?

      —¿Fiona? Sí, así es. ¿Le ha ocurrido algo?

      —Me temo que sí.

      —¿Un accidente de coche? Oh, Dios. —Hundió la cabeza entre las manos. Lottie ya no le veía la cara—. Fiona odia conducir con mal tiempo. ¿Se encuentra bien? —Se puso en pie de repente—. ¿Puedo verla? ¿Está en el hospital de Ragmullin?

      —Por favor, siéntese, Ryan. —Lottie detestaba esta parte del trabajo—. Las noticias son peores. Hemos encontrado a la señorita Heffernan esta tarde. Lamento decirle que ha fallecido.

      Ryan se sentó, con ojos interrogantes.

      —¿Qué? ¿Cómo? ¡Oh, Dios mío!

      —No ha sido un accidente de coche. —La inspectora se fijó en las expresiones cambiantes en el rostro del hombre. Confusión. Incredulidad. Horror. Parecía genuinamente consternado.

      —¿Qué? ¿Qué ha pasado? No puedo creerlo. Nos casábamos mañana. Esta es su segunda oportunidad de construir una buena vida, conmigo. Oh, Dios, no…

      Lottie estudió el abarrotado salón y se preguntó si era allí donde Ryan pretendía vivir con Fiona, pero era demasiado pronto para preguntas tan intrusivas. Tan solo necesitaba averiguar dónde había estado Ryan aquella tarde.

      —¿Está en condiciones de continuar? ¿Quiere que su hermana…?

      —No. No le diga nada a Zoe, por favor. Se lo contaré cuando se hayan marchado.

      —Ha mencionado que esta era la segunda oportunidad de Fiona. ¿Había estado casada antes? ¿Se había divorciado?

      —No, nada de eso. Estuvo varios años con un capullo de mierda; todavía estaban juntos cuando nos conocimos. Quedó muy herida después de esa «relación»… pero estábamos bien juntos. —Hizo una pausa y levantó la vista hacia Lottie—. Dígame, por favor, ¿qué le ha pasado?

      —Se ha encontrado su cuerpo hoy alrededor de las tres de la tarde. —Lottie pensó en la mejor manera de ordenar las palabras—. Parece que ella, em… se cayó del tejado de la abadía de Ballydoon.

      —Oh, Dios mío. Esto es terrible. —Ryan se pasó la mano por el pelo y luego por la barbilla cubierta de barba antes de apoyar los codos en las rodillas—. Espero que no haya sufrido.

      «Extrañas palabras», pensó Lottie. Intentaba con todas sus fuerzas comprender a Ryan Slevin.

      —Tendremos más información sobre lo que ha ocurrido después del examen post mortem.

      La mirada de Ryan la cogió desprevenida. Era penetrante y cualquier rastro de una sonrisa había desaparecido de sus ojos.

      —Ha mencionado el tejado. ¿Qué hacía allí arriba?

      —Todavía estamos estudiando los hechos.

      —Pero… —Fue como si de repente comprendiera, y un estallido de furia reemplazó la incredulidad—. ¿Piensan que saltó? No. De ninguna manera, Fiona no haría eso. Vamos a casarnos mañana, y adora a su pequeña. ¿Qué hay de Lily? ¿Se encuentra bien? ¿Quién cuida de ella?

      Lottie se volvió con el ceño fruncido, interrogante, y miró a Kirby. Este negó con la cabeza y alzó las cejas. Era la primera vez que oían que Fiona tenía una hija.

      —¿Fiona tiene una hija?

      —Sí, Lily —repitió Ryan.

      —¿Sabe dónde está? —preguntó Lottie con urgencia.

      Ryan se levantó de un salto, apretando un puño y golpeándolo contra la otra mano.

      —¿Me está diciendo que nadie ha ido a buscarla a su club extraescolar? Estará aterrorizada. —Sacó el teléfono del bolsillo y revisó furiosamente los mensajes y llamadas—. Nadie me ha llamado. Habrán intentado contactar con Fiona.

      —Cogimos su bolso y móvil de la taquilla. Están registrados como pruebas —intervino Kirby.

      —¿Y no visteis nada en el teléfono o en el bolso sobre su hija? —preguntó Lottie.

      —No, creo que no. —Kirby consultó su libreta.

      —¿Qué СКАЧАТЬ