Название: Limited Inc
Автор: Jacques Derrida
Издательство: Bookwire
Жанр: Документальная литература
isbn: 9789569441448
isbn:
* Traducción modificada. La versión en español remitida prescinde de la oración: “para contraer matrimonio (cristianamente) es esencial que no esté casado con una mujer viva, que esté espiritualmente sano y no divorciado, etc.”. En su lugar, se lee: “para asumir el cargo es esencial que yo reúna los requisitos correspondientes, etc.” Cf., Austin, J. L. How to do things with words. London: Oxford University Press, 1962, p. 8. [N. del T.].
8 Austin, J. L. Op. Cit., pp. 48-50.
9 El valor muy sospechoso de lo “no-serio”, es un recurso muy frecuente (véase, por ejemplo pp. 148, 177 [tr. fr. pp. 116, 130]). Tiene una conexión esencial con lo que Austin, en otros lugares, dice de la oratio obliqua (p. 115 [tr. fr. p. 92]) o del mimo.
10 Desde este punto de vista, se puede interrogar el hecho, reconocido por Austin (p. 111 [tr. fr. p. 89]), de que “es muy común que la misma oración sea empleada en diferentes ocasiones de ambas maneras, esto es, de manera realizativa y constatativa. Esto parece no tener remedio si hemos de dejar a las expresiones lingüísticas tal como están y nos obstinamos en buscar un criterio” (p. 111 [Trad. modificada]). Es la raíz grafemática de la citacionalidad (iterabilidad) lo que provoca este desconcierto y hace que “muy probablemente, ni siquiera –dice Austin– se pueda enunciar una lista exhaustiva de todos los criterios posibles” (Ídem [Trad. modificada]).
* La expresión “doublure” hace señas tanto al doble del teatro lírico o del ballet, es decir, al artista secundario que está listo para reemplazar al actor principal, por ejemplo en escenas peligrosas, así como al forro interior de una prenda o un telón (ridueu). Sobre el doublure, véase, por ejemplo, Derrida, J. La diseminación (trad. José Manuel Arancibia). Madrid: Fundamentos, 1977, p. 14 (La Dissémination. Paris: Seuil, 1972, p. 14). [N. del T.].
* Si bien “source” puede ser traducido por “fuente”, hemos preferido la voz “origen” pues “source de l’énonciation” no es sino la traducción de Gilles Lang para “the utterance-origin”. Localizamos, pues, la cita de J. L. Austin:
“Where there is not, in the verbal formula of the utterance, a reference to the person doing the uttering, and so the acting, by means of the pronoun ‘I’ (or by his personal name), then in fact he will be ‘referred to’ in one of two ways:
(a) In verbal utterances, by his being the person who does the uttering-what we may call the utterance-origin which is used generally in any system of verbal reference co-ordinates.
(b) In written utterances (or ‘inscriptions), by his appending his signature (this has to be done because, of course, written utterances are not tethered to their origin in the way spoken ones are).” (Austin, J. L. How to do things with words. London: Oxford University Press, 1962, pp. 60-61). Como en los casos anteriores, remitimos la paginación de la edición en español, pero hemos modificado la traducción en función de cómo aparece en el texto de J. Derrida. [N. del T.].
* Derrida escribe “trés sec”, pero no hay que perder de vista que “sec” es también la sigla del presente texto [Signature Événement Contexte], sigla con la cual Derrida lo referirá más adelante, tanto en “Limited Inc. a b c…” como en “Hacia una ética de la discusión”. [N. del T.].
11 Cfr. La diseminación [Madrid: Fundamentos, 1977, pp. 7 y ss] y Posiciones [(Trad. Manuel Arranz) Valencia: Pre-textos, 2014, pp.110-111].
* Considérese que “renverser” refiere a “invertir” la mencionada oposición clásica, pero también significa “hacer caer”, “atropellar”, “trastocar”, “derrocar” esta jerarquía u orden del sistema de subordinación. [N. del T.].
“REITERACIÓN DE LAS DIFERENCIAS: RESPUESTA A DERRIDA”
POR JOHN R. SEARLE
Resumido por Gerald Graff*
En su “Respuesta a Derrida”, titulada “Reiteración de las diferencias”, John R. Searle se centra principalmente en cuatro aspectos relacionados del argumento de Derrida en “Firma acontecimiento contexto”: 1) la asimilación de Derrida del discurso hablado a la escritura; 2) el desafío que lanza al punto de vista que identifica el sentido de un enunciado con las intenciones del orador o del escritor; 3) las implicancias del concepto de “iterabilidad”, palabra con la cual Derrida designa la repetibilidad de las mismas expresiones en diferentes contextos (lo que, para Derrida, implica siempre una transformación); 4) su crítica del tratamiento de J.L. Austin de los speech acts ficticios como “parásitos” de los speech acts no ficticios, normales, o “serios”.
La “Respuesta” de Searle responde en mayor parte a la crítica de Derrida del concepto clásico de escritura “en tanto comunicación del querer-decir”. Searle contesta al argumento de Derrida según el cual, como dice Searle, “ya que la escritura puede y debe ser capaz de funcionar en la ausencia radical del remitente [sender/destinateur], del receptor [receiver/destinataire], y del contexto de producción, ésta no puede ser la comunicación del querer-decir [Intended meaning/vouloir dire] del remitente hacia el receptor” (p. 199). Searle argumenta que no es, como pretende Derrida, la “iterabilidad, la repetibilidad de los elementos lingüísticos”, lo que distingue a la escritura del discurso hablado, sino la permanencia [permanence/permanence] relativa de la escritura.
Searle hace notar que todo sistema de representación sujeto a reglas, sea escrito o hablado, debe ser repetible, ya que “de otra forma, las reglas no tendrían campo de aplicación” (p. 199). Además, el discurso escrito no se distingue del habla por la ausencia del receptor a la del remitente. Porque “una comunicación escrita puede tener lugar en presencia del receptor, como, por ejemplo, cuando hago una lista para ir de compras, o cuando deslizo una nota a mi acompañante durante un concierto o una conferencia” (p. 200). Searle concluye que “el fenómeno de la sobrevida [survival/survie] del texto no es lo mismo que el fenómeno de la repetibilidad”, porque el mismo texto “puede ser leído por muchos lectores diferentes, mucho después de la muerte del autor, y es este fenómeno de la permanencia del texto el que hace posible separar el enunciado [utterance/énoncé] de su origen [origin/origine], y distingue la palabra escrita de la palabra hablada” (p. 200).
Para Searle esta “confusión entre permanencia e iterabilidad” es central para la asimilación del habla por la escritura (p. 200) de Derrida. Él argumenta que “la forma en la que un texto escrito es apartado [weaned/sevré] de su origen es muy diferente de la forma en la que toda expresión puede ser separada [severed/détachée] de su significado [meaning/sens] a través de la forma de ‘iterabilidad’, que está ejemplificada en la cita” (p. 200). Ya que la “posibilidad de separar el signo [sign/signe] del significado [signified/signifié]” es un rasgo característico de todos los sistemas de representación como tales, “no hay nada especialmente grafemático” acerca de la separación (p. 201), ni nada que sea propio del concepto clásico de escritura descrito por Derrida.
Así, Searle se opone a lo que él toma como el argumento de Derrida, a saber, que el discurso escrito implica una “ruptura con las intenciones del autor en particular o con la intencionalidad en general” (p. 201). Searle sostiene, por el contrario, que “el hecho que la escritura pueda continuar funcionando en la ausencia del escritor, del remitente referido [intended receiver/destinateur], СКАЧАТЬ