En unión sagrada con un pastor. Somerville Mary
Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу En unión sagrada con un pastor - Somerville Mary страница 3

Название: En unión sagrada con un pastor

Автор: Somerville Mary

Издательство: Bookwire

Жанр: Религия: прочее

Серия:

isbn: 9781629461519

isbn:

СКАЧАТЬ de desafíos éticos y teológicos. Compartiré experiencias y lecciones que he aprendido durante mi vida como esposa de pastor; así mismo, compartiré las ideas e inspiración de las vidas de mujeres durante la historia de la iglesia, quienes han hecho una gran contribución.

      Una de esas grandes mujeres es María Taylor. Todas las cualidades de una esposa de misionero las encontró Hudson en María. Amaba tanto a Dios que ella decía que, a pesar de su amor por Taylor, ella no estaría dispuesta a casarse con él si la amara más a ella que a Jesús o si quisiera dejar el trabajo a Dios por el honor que otorga el mundo. Fue su ayuda en numerosas ocasiones, hablaba chino con fluidez y dirigía una pequeña escuela, lo cual fue la fuente de un escaso sueldo para que Hudson pudiera establecer su primera iglesia. Ellos no recibían ningún ingreso fijo como misioneros. Fueron los pioneros de la gran obra en China, cuyos esfuerzos guiaron el camino a las misiones de fe. Hudson y María eran un equipo. “Indudablemente, el factor primordial en su matrimonio fue que ambos eran igualmente leales a su vocación; sin María, Taylor no se habría embarcado en esta clase de trabajo”.

      Tú también, querida hermana, tienes un rol significativo en la vida y en el ministerio de tu esposo. Tú también puedes ver a Dios hacer grandes cosas a través de tu fidelidad y de tu apoyo amoroso. Debido a que ya he estado en tus zapatos, sé que no es fácil. Es un rol demandante, pero todas estamos juntas. Tenemos una especie de hermandad por lo que compartimos mutuamente. Nuestros retos son casi iguales, sin importar el tipo de ministerio, o su ubicación y tamaño.

      Tenemos muchas dificultades que soportar junto con nuestros gozos y recompensas. Para completar este rol demandante, necesitamos una de la otra, compartir tanto cargas como logros; es una visión por la cual vale la pena entregar nuestras vidas. Podemos vivir con nuestro mayor potencial por el reino de Dios a través del poder del Espíritu Santo.

      El título de este libro, En unión sagrada con un Pastor, envuelve lo que creo es la clave para una vida plena como esposa de un ministro; expresa la relación que tienes con tu esposo y con Cristo. Estar unido a ambos es la clave. Como creyentes somos uno con el Buen Pastor, quien compró Su grey por su muerte en la cruz; apartados de Él, nada podemos hacer; si permanecemos en Él, podemos lograr muchas cosas. Así mismo, cuanta mayor unidad haya en nuestro matrimonio con un pastor del rebaño del Señor, mayor efectividad tendremos en nuestro llamado personal.

      ¡Cuánto fortalecimiento hay en la unidad unos con los otros y con el Señor! “Y cordón de tres dobleces no se rompe pronto” (Ec. 4:12). Cuanto mayor unidad haya en nuestros matrimonios, mayor gozo tendremos, nuestros esposos serán más efectivos y la iglesia de Cristo será fortalecida. Confío en que este libro sea una ayuda para llegar a ese fin. No tengo todas las respuestas; yo misma estoy en este camino buscando con fe, buscando guía en Dios y Su palabra– todo para la gloria de Dios y ser gloriosamente uno con el pastor.

      — Mary Somerville

      ENTENDIENDO

      NUESTRO PAPEL

      COMO ESPOSA

      

Un noble rol

      Muchas mujeres hicieron el bien; más tú sobrepasas a todas.— Proverbios 31:29

      Ella es un precioso tesoro, de genuino valor y posee un celo para ayudar a esta pobre gente.— Hudson Taylor hablando de su esposa María1

      Bien, buen siervo y fiel…entra en el gozo de tu Señor.— Mateo 25:21

      Como esposas de pastores o ministros de la iglesia, estos serían los reconocimientos que todas quisiéramos escuchar; pero, en ocasiones, estamos tan preocupadas por cumplir con las expectativas de otros, aparte de las del Buen Pastor, que nos abrumamos con innumerables tareas.

      ¿Un rol confuso e imposible?

      «Se busca: mujer que trabaje de tiempo completo, sin ninguna paga, en la oficina de su marido, largas jornadas, requiriendo re-ubicación frecuente. Debe ser amable y comprensiva todo el tiempo.» Miles de mujeres, dirigidas por el amor y devoción a Dios y a sus familias trabajan en este puesto, el cual es ser esposa de un ministro. Pero la tensión de la soledad, luchas financieras y cargas pesadas de la iglesia, pueden apagar el gozo de su matrimonio.2

      El párrafo anterior es un comunicado de la Associated Press titulado “Esposas de ministros enfrentan desafíos”.

      ¿Esto te describiría? ¿Sientes la tensión del ministerio y te sientes abrumada por la presión y demandas que conlleva este rol? De acuerdo con el artículo citado no estás sola, miles de esposas de ministros se sienten de la misma manera.

      ¿Estás confundida por no saber en dónde encajar o cómo suplir las necesidades del ministerio compartido de tu esposo? Cada trabajo trae requerimientos y expectativas. Generalmente hay una clara guía de las expectativas de un pastor o de un líder de jóvenes, el encargado de la alabanza, educación cristiana, misiones, adoración y familias de los ministros. Así mismo para los misioneros, diáconos, ejecutivos de la iglesia y otros que trabajan fuera del edificio de la iglesia local. Rara vez se encuentra una descripción del trabajo que debe cumplir la esposa de un pastor, eso sin mencionar las expectativas que se tienen de ella.

      “La esposa del pastor (esposa del pastor de jóvenes, esposa de un misionero) debe ___________”. ¿Cómo llenar el espacio en blanco? Tal vez la esposa del ex-pastor lo hacía todo y por tal motivo estableció un precedente. Posiblemente, la iglesia tenga altas expectativas de lo que esperan que la siguiente esposa del pastor deba o no realizar.

      Todo esto se agrava por el hecho de que la familia pastoral vive en una pecera, se espera que sean un ejemplo en todo lo que hacen, son escudriñados y criticados; y después de todo esto, vienen las expectativas que tú te exiges a ti misma.

      Tal vez te encuentres alguna vez diciendo a los demás, “Sé que los padres de nuestros jóvenes quisieran que estuviera más involucrada, pero simplemente no puedo con dos preescolares en casa. Me hace sentir mal no poder ayudar más a mi esposo con los jóvenes, por ello, a menudo me siento excluida de su vida, ya que no puedo ayudar más”. He estado ahí, y sé lo que se siente experimentar eso.

      Otra esposa compartió “Me siento desgarrada. No sé cómo balancear los roles en la iglesia, las necesidades de mi esposo, educar en casa a tres niños pequeños y pasar tiempo con mi mamá que se encuentra sola desde que mi papá murió. Sé que la iglesia espera más de mí, pero no puedo dar más”. ¿Te suena familiar? Me he sentido así, especialmente cuando cuidé a mi padre inválido en casa. Hay presión en todos lados.

      ¿Cómo una esposa de ministro sabe cuándo ha llevado a cabo su tarea y hecho un buen trabajo? ¿Cómo puede lidiar con las expectativas de todos, incluyendo las propias expectativas? He observado que las esposas de ministros usualmente son mujeres de alto rendimiento. Los esposos están ahí afuera cambiando el mundo y sus esposas están ahí a su lado. Deseamos estar ahí y dar lo mejor de nosotras para la gloria de Dios.

      Si deseas ser libre del peso de la culpa, primero debes determinar si has cedido a expectativas no bíblicas. Proponte descubrir y completar el llamado de Dios, sabiendo que no te dará más de lo que puedas soportar. Comprende también que no respondemos a nadie más; sólo respondemos a Dios por nuestras acciones. Pablo decía que lo que pensaran las personas de él no tenía importancia y que, incluso, su propia opinión de sí mismo era inconsecuente. Se dio cuenta que a Dios era al único que debía complacer (1 Corintios 4:1-5, 1 Corintios 3:13, 2 Corintios 5:10). “De manera que cada uno dará a Dios cuenta de sí” СКАЧАТЬ