El pájaro que limpia el mundo. Víctor Montejo
Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу El pájaro que limpia el mundo - Víctor Montejo страница 2

Название: El pájaro que limpia el mundo

Автор: Víctor Montejo

Издательство: Bookwire

Жанр: Языкознание

Серия: K´uhul Tun

isbn: 9789929771314

isbn:

СКАЧАТЬ viejos: el jaguar, el perro y el coyote Kolke'b'ail: no’ b'alam, metx tx'i' b'oj no' oj

      • Cómo nació la víbora Tzet xu swaykanh no' icham lab'a

      • El sapo y el zope No' ponhom b'oj no' usmij

      • El sapo y el cangrejo No' ponhom b'oj no' chap

      • El lagarto malagradecido No' k'ab'tzinha' tx'oj yanma

      • El caracol y la sardina No' xotx b'oj no' uskay

      • La gallina y la rana No' ixnam chiyo b'oj no' pahtza'

      • El niño desobediente Naj ni'an manhk'ul

      • La cola del perro Snheh metx tx'i'

      • La prueba de los ratones Ilweb'al yet hej no' tx'ow

      • El que corta árboles acorta su propia vida Maktik'a stzok'nik'oj te' te' hatitk'a sq'inal chiloj

      • El niño que hablaba con los pájaros Naj ni'an stzotel b'oj no' ch'ik

      • Las visiones del perro Smujlub'al metx tx'i'

      • El parlanchín y la muerte Naj xholpeq' b'oj naj kaminal

      • El hombre y el zopilote Naj winaj b'oj no' usmij

      • El hombre perezoso Naj isa winaj

      • El gran jaguar No' ich niman b'alam

      • Apéndice y glosario

Illustration

      El pájaro que limpia el mundo

      No’ ch’ik xtx’ahtx’en sat yib’anh q’inal

      Illustration Antiguamente, nuestros antepasados los mayas hablaban de un gran diluvio que inundó y destruyó toda la tierra. Ellos contaban que las aguas crecieron, crecieron y crecieron; inundando todos los montes y los cerros más altos y muriendo todo lo que tenía vida sobre la tierra. Solamente una casa se había elevado sobre las aguas, donde se escondieron todas las especies de los animales que ahora existen.

      Por mucho tiempo las aguas cubrieron el suelo y muy lentamente fueron bajando y bajando, hasta que la tierra quedó nuevamente libre de aquellas turbulentas aguas destructoras.

      Cuando aquella casa estaba todavía sobre las aguas, el protector de los animales envió a Ho Ch'ok, el clarinero, a observar el horizonte; y como el nivel del agua estaba todavía alto, el clarinero regresó prontamente a dar parte, cumpliendo así con su misión.

      Pasó otro tiempo más y se envió a Usmij, el zopilote, a observar el nivel del agua que bajaba. El mensajero salió volando de la casa, dando varias vueltas en el aire. Luego se dirigió a uno de los cerros ya libres del agua donde aterrizó hambriento. Encontró allí una gran cantidad de animales muertos y putrefactos; y sin importarle su misión, comenzó a devorar parte de aquella carne hasta saciar su voraz apetito.

      Después de darse el gusto, Usmij quiso regresar a dar parte de sus observaciones, pero cuando llegó a aquella casa ya no se le recibió entre los demás porque su hedor era insoportable. Como castigo a su desobediencia, Usmij fue condenado a alimentarse de todo animal muerto, y a ser el amo de lo podrido y nauseabundo.

      Desde entonces al zopilote se le llamó «el pájaro que limpia el mundo», por su nuevo oficio de asear con el pico todo lo que pueda contaminar el ambiente.

      Usmij, el zopilote, tuvo que conformarse con su suerte y así se alejó volando y revoloteando; acechando siempre en los barrancos en busca de lo que a los zopes les gusta, la podredumbre.

      El oficio del zancudo

      Smunil no' xen

      Illustration El oficio de pinchador que ejerce el zancudo, es siempre un grave riesgo o un peligro del que no se sabe si saldrá siempre con vida. La mayoría de las veces mueren en el momento de dar el pinchazo a su víctima. Si el zancudo es ágil y afortunado, pues logra satisfacer su apetito y alejarse zumbando; pero si no, ¡pobre! En el acto es sorprendido con el palmotazo que lo deja allí destripado.

      Venía pues un zancudo zumbando de felicidad porque había salido ileso de su oficio al pinchar a un viejo durmiendo.

      En el camino se encontró con otro que aún iba en busca de su sustento y le preguntó:

      —¿A dónde vas, zancudo?

      —Voy a sangrar a alguno.

      —¿Cuándo piensas regresar?

      —¡Ya el golpe lo dirá!

      La guerra de las avispas

      No' ch'uchu a'om howal

      Illustration A la cueva de los jaguares llegó cierta tarde un grillo vagabundo, queriendo pasar allí la noche. Sin el consentimiento ni el permiso de los dueños de la mansión, se introdujo en un pequeño agujero de la cueva y allí como costumbre o como vicio innato a su ser, comenzó a chillar escandalosamente durante la noche. Con sus chillidos, el grillo perturbó la calma que reinaba, inquietando a la gran familia de los carnívoros.

      Los chillidos del grillo que enloquecían a los habitantes de la cueva se escuchaban largamente, rajando el silencio e interfiriendo en las profundas meditaciones de los reverendos búhos que se hallaban en su retiro sobre musgosas ramas de viejos chapernos.

      Pasadas unas horas y no resistiendo más los escandalosos chillidos, los jaguares se levantaron bravísimos y con claras intenciones de exterminar al causante СКАЧАТЬ