Desde la capital de la República. AAVV
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Название: Desde la capital de la República

Автор: AAVV

Издательство: Bookwire

Жанр: Документальная литература

Серия:

isbn: 9788491344094

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СКАЧАТЬ el 2 de noviembre de 1936, Tchapaief, como el Kronstadt, era una historia bélica con ecos significativos para los soldados republicanos.68 La película narra la vida de Vasilii Chapayev, figura mítica de la guerra civil rusa que en 1919 aterrorizó a las tropas blancas en los Urales e inspiró al campesinado a defender la Revolución. En la película, el protagonista es promocionado a comandante, lidera brillantemente a sus hombre a una ofensiva y finalmente cae en la batalla de forma heroica.69 Tchapaief se convirtió en la película más vista en la España republicana, el Partido Comunista le dio gran valor pedagógico y muchos soldados la vieron repetidamente.70

      Desde luego, la influencia militar soviética en la guerra llegó pronto a su mejor momento, pero la ventaja, una vez perdida, nunca se recuperó. El periodo de veintiún meses entre junio de 1937 y el final de la guerra, el 1 de abril de 1939, estuvo marcado por un continuo descenso en la implicación soviética con la República. Todos los indicadores importantes de la implicación soviética con la causa republicana estaban en declive: los suministros de armas se redujeron dramáticamente, las misiones diplomáticas se degradaron y retiraron, y los aviadores y las tripulaciones de los tanques se sustituyeron por republicanos. También se moderó la ofensiva propagandística inicial y, de hecho, en algunos ámbitos se eliminó. En el frente doméstico, el régimen soviético comenzó a desvincular a la población de los asuntos españoles. La guerra desapareció de las páginas centrales de los periódicos soviéticos estatales y en los discursos públicos los líderes soviéticos cada vez mencionaban menos la causa de la República. En los cines rusos, los noticieros dedicados a la segunda guerra chino-japonesa comenzaron a sobrepasar a la cobertura del conflicto en España. Durante los últimos veinte meses de la guerra, mientras que el Kremlin podía no haber abandonado totalmente sus esperanzas en una victoria republicana, el líder soviético no era tan optimista.