Historia de Venezuela, Tomo II. Pedro de Aguado
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Название: Historia de Venezuela, Tomo II

Автор: Pedro de Aguado

Издательство: Public Domain

Жанр: Историческая литература

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СКАЧАТЬ españoles fueron sentidos por los yndios deste pueblo antes que llegasen a el, y asi, desanparandolo de rrepente, se dieron a huir casi a uista de los soldados, los quales no fueron nada perezosos en seguir el alcanze, y mediante su buena diligencia, prendieron al cacique de aquel pueblo y a su muger, que hera la natural37 señora de aquel pueblo, y era llamada la Toto38. Dieronse luego los soldados á buscar lo quen las sepulturas y casas auia, y hallaron en el buhio o sepultura del diablo mas de quarenta mill pesos de fino oro, sin otra mucha cantidad que por las casas y sepulturas se sacaron, como adelante dire.

      CAPITULO QUARTO

      En que se escriue los diferentes Cenues39 que ay, y qual es el principal, y las sepulturas que en este Fin Cenu se sacaron y su manera, y el disparate y muerte del capitan Ojeda y de sus ssoldados.

      Antes que pasemos adelante sera uien dar noticia en este lugar desta noticia del Cenu, que tan nonbrada a sido en estos nuestros tienpos y codiciada de muchos, por lo que los principales deste Zenu donde Don Pedro de Heredia estuuo, dixeron a los españoles, y por otras cosas que adelante se dira.

      En este paraje de Cartaxena, entre el rrio Grande de la Magdalena y el rrio del Darien y el de Cauca, estan estos señores, hazia el Poniente, los quales son tres Zenues. El primero es este donde Don40 Pedro de Heredia llego, que por sus naturales es llamado Fincenu. Esta quatro o seis leguas apartado del rrio del Darien, que tanbien es llamado del Cenu, por donde suuio antiguamente el capitan Ojeda, despues que le mataron a Juan de la Cosa, su conpañero. En este Fincenu se sacaua oro, mas por rrespeto de ser los moradores del todos plateros y artifizes de labrar oro, acudian a hellos de los otros dos Cenues donde se sacaua el oro, y pagauanles su trauajo por algunas joyas y obras de oro que les hazian, y ansi auian venido a ser muy rricos y a poseher tanto oro como los españoles en el hallaron, y tambien por otros rrespetos que luego se dira.

      El otro Cenu se decia Cenufana, que tambien fue descubierto por españoles que de la Gouernacion de Cartajena salieron, del qual tambien se tratara adelante. El terzero se dize Zanzenu. Este es el que oy esta uer y descubrir entre el rrio Grande de la Magdalena y el rrio de Cauca. En estos tres Cenues decian los yndios deste Fincenu que auia tres diablos por señores, y que el diablo mayor esta en el Pancenu, y en este Fincenu hesta una hermana del diablo mayor a quien el propio diablo amaua y quería mucho, por cuyo rrespeto muchos yndios principales del Pancenu se mandauan lleuar á enterrar al Fincenu con sus rriquezas, y el questo no hazia enuiauan aquel les señalasen y diesen sepultura en este Fincenu, y en ella manda enterrar la mitad del oro que tenia, y desta abusion41 y supresticion diabolica que entre estos baruaros auia, uino a estar el Fincenu tan poblado de rricas sepulturas echas de mogotes muy altos y otros no tanto menos y mas, segun la calidad del yndio que se enterraua, y tanto quanto edifizio o tumulo de sobre la tierra hera de alto, tanto tenia de hondo la sepultura, y asi obo y se sacaron rricas sepulturas de a treinta mill pesos, de a ueinte mill y de honze mill y seis y siete mill pesos y a menos y a mas42.

      Ubo mucha cantidad de sepulturas que no tenian mogote ni señal encima de la tierra, y a estas descubrian dando fuego a la savana, y despues de quemada la paja cauauan y dauan cata en la haz de la tierra, y donde hallavan dos dedos de tierra negra y luego vna harenilla blanca era sepultura, y con esta señal seguian asta llegar a donde estaua el difunto o el oro, y hallandolo no curauan de pasar de alli. Obo gran cantidad de sepulturas que tuuieron a quinientos y seiscientos pesos, y pocas de aqui para uajo, y ninguna que hen ella no se hallase oro.

      Todo el oro questas sepulturas tenian, estaua puesto al lado del corazon, y aun en el propio corazon de los muertos, lo qual conocieron bien en breue los españoles, y despues que dello tuuieron conocimiento no hazian mas de en descubriendo la sepultura boluer el rrostro al ssol y cauar a la parte siniestra de la sepultura, y asi hallauan con menos trauajo lo que auia dentro, porque como en aquella parte del corazon no ouiese oro no curauan de buscallo, porque tenian ya entendido que auia de ser su trauajo en bano.

      La sepultura del diablo, para uer los españoles lo que hen ella auia, gastaron mas de mill y quinientos pesos, y con todo este trauajo no pudieron derriuar de lo que sobre la tierra auia edificado mas de la mitad; y como ya tenian conocimiento los soldados de la parte donde auian de hallar el oro y hallaron lo que rreferido, no curaron de echar mas peones, porque les parecio que hera cosa perdida. Hallaronse ansi mismo en esta sepultura gran cantidad de mucuras de vino convertido en agua, y mas de cinquenta piedras de moler, de hechura de las de Nueua España. Alrrededor de esta sepultura, en contorno de treinta pies, estauan doze sepulturas yguales, el altor que cada vna tenia, siete estados, y en cada vna destas se hallaron de honze mill pesos pararriua, y asi fue grandisima la suma de oro que deste poblezuelo se saco, el qual no tenia mas de veinte cassas principales, en que los yndios viuian, y cada casa destas tenia a la rredonda de si otras tres ó quatro para sus haziendas y seruicios estrahordinarios, las quales eran todas grandes, de pared alta, casi de la forma y echura que los españoles las hazen para su biuienda. Preciauanse de tenellas linpias y barridas, para el qual efeto tenian vnas escouas largas, de la forma que las tienen en los monasterios, para no auajarse. Durmian o tenian por camas, para durmir, hamacas.

      La señora deste pueblo hera de gran grauedad y muy rrespetada de sus subditos. Por grandeza acostunbraua que de un lado y otro de su amaca durmiesen en el suelo dos yndias mozas, gentiles mugeres, los rrostros bueltos a la tierra, para quando se lebantase o sentase en la amaca poner sobre hellas los pies. Hera de muy pocos moradores este pueblo, que hen el no auia a la sazon cien yndios, y parecia por sus rruines43 y bestigios, auer sido en tienpo antiguo de mucha becindad. Preguntoseles a los yndios como heran tan pocos, y si auian sido en otro tienpo mas: rrespondieron que despues que mataron alli muchos españoles se auian ydo sienpre apocando y muriendo hasta el estado en questauan.

      La gente que estos baruaros destruyeron y mataron fue el capitan Ojeda, de quien atras e echo mencion, que fue aqui muerto el y toda su jente; y segun estos mismos yndios contaron, passo desta manera. El principal deste pueblo tuuo noticia, de yndios sujetos suyos, como el capitan Hojeda y sus conpañeros, subiendo por el rrio Darien o Cenu arriua, en sus uergantines, auian llegado a un pueblo questa en las rriueras del propio rrio, sujeto a este casique, Tocurru44, apartado deste Cenu quatro o cinco leguas. Los yndios y principal que en Tocurru auia y auitauan, dieron luego noticia al casique del Fincenu de la llegada de los españoles a tierra, y pidiendole ynstruicion y horden de lo que deuian hazer, ynbioles luego vn capitan yndio con cierta gente de guerra y mandoles que en ninguna manera esperasen a pelear con los españoles, sino que les vyesen y se apartasen dellos todo lo posible, de suerte que no rreciuiesen daño ninguno asta que el juntarse todos los yndios sujetos suyos y con copia de jente hiziese lo que conuiniese. Los yndios de Tocorru lo hicieron como les fue mandado, porque luego que Ojeda habordo en tierra y dio uista a este pueblo, uiendo que los yndios lo desanparauan y huian, echo en tierra toda la mas gente y siguiendo con ella el alcanze de los yndios que de yndustria vyan, dejo con poco rrecaudo y guardia los uergantines y enbaracose en saquear y rrouar lo que en aquel pueblo auia45.

      Ya questaua algo apartado del rrio, tuuo desto noticia el casique o señor del Fincenu, e con toda presteza enuio zierta cantidad de yndios que se metiesen y apoderasen en los uergantines y matasen los que dentro ouiesen. Hizieronlo estos yndios como les fue mandado, y con mucha facilidad se apoderaron de los uergantines y mataron los soldados que dentro hallaron, y el casique con la mesma presteza tomo el rresto de la jente que le quedaua, que hera grande cantidad, y de noche, con la luna, dio en el capitan Ojeda, questaua alojado en el propio pueblo de Tocorru y con mas confianza de la que deuia tener para estar en tierra de enemigos, y alli, antes que tomasen las armas, les mataron muchos soldados, y despues se trauo entre todos la pelea vien rreñida por anbas СКАЧАТЬ



<p>37</p>

En la edición de Caracas se dice, sin duda por error de imprenta, naural por natural.

<p>38</p>

En la edición de Caracas: Latoto.

<p>39</p>

Cenues ó Cenus, pues hay una letra borrosa. – En la edición de Caracas, Senus.

<p>40</p>

En la edición de Caracas se omite el Don.

<p>41</p>

En la edición de Caracas: y de este abuso. – Abusión significa abuso.

<p>42</p>

En la edición de Caracas no se hace aquí punto ni coma, y está todo seguido.

<p>43</p>

Debe querer decir ruinas.

<p>44</p>

En la edición de Caracas: del propio río Tocurru. – Se da así al río Darien el nombre del cacique del pueblo.

<p>45</p>

En la edición de Caracas no se hace aquí punto.