Название: Relaciones familiares
Автор: María Hilda Sánchez Jiménez
Издательство: Bookwire
Жанр: Документальная литература
Серия: Libros de investigación
isbn: 9789587592344
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Lista de tablas
Tabla 1. Guía final de la entrevista abierta
Tabla 2. Identificación de las distintas situaciones de crisis
Tabla 3. Categorías y subcategorías centrales de análisis
Lista de gráficos
Figura 1. Guía inicial de la entrevista abierta
Agradecimientos
Siempre, detrás de un libro se encuentra un cúmulo de personas, grupos, momentos, historias, sueños y emociones. En el proceso de la escritura de un texto aparecen y desaparecen, van y vienen, imágenes que tienen sus propias voces, las cuales por la mediación de quien escribe toman otra identidad que va mutando relectura y la reescritura. La interacción con estas imágenes es el momento más dialógico, reflexivo y conversacional que tiene cada persona que es autora de una obra. La obra siempre será un comienzo, es imposible cerrarla porque siempre llegarán nuevas lecturas e interpretaciones, otras imágenes que serán diferentes y que, de alguna manera, servirán para abrir nuevos escritos con otras identidades.
En el proceso de escritura del presente libro, al comienzo, se tejió la escritura del texto base denominado investigación y su desarrollo se cruzó con la presencia de quienes han aportado valiosas semillas para la reflexión. Con este preámbulo, mis agradecimientos:
A la Universidad de Caldas y al grupo de docentes del Departamento de Estudios de Familia que siempre han apoyado mis desarrollos profesionales y académicos.
A mi hermana por ofrecerme su tiempo e historia vivida como crítica en uno de esos caminos en los que la violencia tocó las puertas de nuestra casa. Un ejercicio piloto en el que puse a prueba la entrevista a profundidad, lo cual me permitió ajustar detalles con base en sus recomendaciones y diálogo en torno la a delicadeza con que había que registrar la información.
A los integrantes de tres familias residentes en Buenos Aires: una del sur de Argentina, otra migrante peruana y una colombiana que se encontraba temporalmente en la ciudad de Buenos Aires. Ellas y ellos, en el marco de un ejercicio piloto, me ofrecieron su tiempo, me dieron permiso para realizar las entrevistas video grabadas sobre situaciones de crisis vividas y superadas. Ellas y ellos también sugirieron algunos correctivos para que las preguntas fueran más claras y limpias al momento de la entrevista.
A Luz Nelly González López, secretaria profesional de la Universidad de Caldas, por su valioso aporte, por la paciencia en la transcripción de la información grabada y por su ayuda en el diligenciamiento de los formatos administrativos solicitados por la Universidad, para que los trámites se hicieran con mayor facilidad y agilidad.
A la profesional en Desarrollo Familiar Sandra Milena Valencia y a la psicóloga Paula Vanessa Sánchez Agudelo, con quienes compartí mis reflexiones sobre la investigación. Ellas hicieron recomendaciones de ajustes a la guía de entrevista que había elaborado para una de las partes del primer proyecto de mi tesis doctoral y también les agradezco por su participación en el desarrollo de algunas entrevistas. La transcripción de la información fue entregada a ellas como insumo para escritos académicos que las profesionales deseen realizar en el campo de familia y relaciones familiares e, incluso, para debatir y enriquecer planteamientos de este libro.
A la doctora Dora Fried Schnitman porque, en calidad de directora de mi tesis doctoral, me recomendó que la segunda pregunta que formulaba en mi proyecto de tesis, como lo que había sustentado de ella, la tuviera presente para desarrollar una nueva investigación en el campo de los códigos sociolingüísticos articulados con las relaciones familiares. El resultado de esta investigación se expone en el presente volumen.
Al equipo de trabajo del I Diplomado Internacional sobre Prácticas Dialógicas (2011–2013), liderado por la doctora Dora Fried Schnitman. Diplomado que se llevó a cabo a través del convenio de colaboración entre la Fundación Interfas –Argentina–, la Escuela de Psicología de la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI) –Chile– y el Taos Institute –Holanda–. Durante 2 años fuimos constantes tanto en el desarrollo de esta propuesta como en los encuentros, las conversaciones y los diálogos virtuales con psicólogas y psicólogos de diferentes países. Por Argentina, Dora Fried Schnitman, Ruth Casabianca, Silvia Crescini, Ibar Martínez Melella, Eliusa Petroni, Cristina Ravazzola, Eva Rotenberg, Silvia Vecchi y Martín Glozman. Por Brasil, Marilene Grandesso, Vania Yazbek y Màrcia Volponi. Por Chile, Jorge Sanhueza, Roberto Arístegui, Jorge Leiva, José Víctor Núñez, Christian Weason, Loreto Céspedes y Thelma Margulis. Por Colombia, Julián Díaz Ospina, Ligia López Moreno, Miriam Salazar Henao, María Camila Ospina Alvarado y María Hilda Sánchez Jiménez. Por México, Papusa Molina y Rocío Chavestre. Por Cuba, Rosario Fraga y Mario Rodríguez Mena. Por España, Joseph Seguí Dolz y Sara Olivé. Por Finlandia, Jaakko Seikkula. Muchos de estos profesionales fueron mis profesores virtuales, a quienes escuché y quienes, a su vez, me escucharon virtualmente. Con ellos, por un lado, compartí mi experiencia sobre códigos sociolingüísticos y, por el otro, profundicé en lo que compartieron conmigo sobre prácticas dialógicas.
Finalmente, agradezco a los actores más importantes de la investigación, los integrantes de las treinta (30) familias de tres municipios (diez (10) de Manizales, diez (10) de Neira y diez (10) de Risaralda). Sus voces narraron y construyeron historias sobre lo que fueron sus experiencias y sus vivencias frente a una situación de crisis familiar y todo cuanto realizaron para hoy reconocer que fue “superada satisfactoriamente”. Mil, mil gracias.
Las experiencias identificadas como críticas son parte de la vida de las personas y de las familias. Estas experiencias son llamadas críticas porque quebrantan, en cada persona, un ritmo de vida, un trayecto cotidiano, conocido, que asegura algunos aires de tranquilidad emocional, física, biológica, social o cultural; y, además, son llamadas críticas porque interfieren abruptamente con una plataforma relacional que brinda seguridad a las personas. Una plataforma que hasta el momento no había sido interrumpida, ni modificada, por lo que, antes de la crisis, las personas danzaban en medio de un cierto nivel de naturalización: “todo iba como de costumbre”.
El énfasis que hago en las palabras ‘quebranto’ e ‘interferencia abrupta’ se propone mostrar que las experiencias críticas tienen que ver con una ruptura creada en alguien y en algo; con una situación humana, familiar y social cuyas consecuencias inesperadas sobrepasan las capacidades de manejo inmediato; es decir que una experiencias crítica es una ruptura que no se controla ni se elabora en corto tiempo, que desplaza gran parte de lo que hacen las personas y que genera distracción frente al ritmo de vida social cotidiano.
El evento crítico marca y deja huellas desde su origen y más allá de su desenlace. Su influencia va desde la crisis inicial y pasa por su transformación hasta llegar al recuerdo de lo que no quiere ser experimentado o vivido nuevamente. Entre el tránsito de un lado a otro y entre las acciones СКАЧАТЬ