¿Depresión? No, gracias. Juan Antonio Guerrero Cañongo
Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу ¿Depresión? No, gracias - Juan Antonio Guerrero Cañongo страница 7

Название: ¿Depresión? No, gracias

Автор: Juan Antonio Guerrero Cañongo

Издательство: Bookwire

Жанр: Зарубежная психология

Серия:

isbn: 9788415306382

isbn:

СКАЧАТЬ las características, rasgos o habilidades que lo distinguen del resto. Aunque es deseable que tengas comunicación directa con la persona que modelarás, no es necesario; puedes elegir a cualquier personaje de la historia, de los negocios o de la vida pública.

      Recopila toda la información que puedas sobre él. Si puedes conseguir un vídeo, será mejor, ya que podrás ver sus movimientos, escuchar su timbre de voz, cómo mira a los demás, etcétera. No te detengas si no consigues un vídeo: puedes imaginar cómo se movía, veía y hablaba de acuerdo con la información que obtengas. Preferiblemente escribe todo ello y léelo varias veces.

      Para obtener información de una persona que no conoces o con la que no has hablado, divide al sujeto en varios yoes: a esto se le llama posturas. Imagina cómo se comportaría desde varias posturas.

      Por ejemplo, si intentas modelar a Albert Einstein, específicamente su capacidad para procesar grandes cantidades de información, podrías hacer lo siguiente:

      Imaginar al Einstein lógico, que no necesita el lenguaje para comprender el todo, sino que se vale de símbolos, ya que el lenguaje es un freno al pensamiento, pero los símbolos pueden tener múltiples significados.

      Al Einstein visual, que imagina y visualiza todo en su mente antes de escribirlo.

      Al Einstein kinestésico, que utiliza su cuerpo para ejemplificar procesos y obtener claves musculares para recordar grandes cantidades de información.

      Pregúntate: «¿Cómo se vería el Einstein lógico, el visual y el kinestésico?», «¿Cómo actuaría cada uno de ellos?», «¿Cómo se moverían?», «¿Cómo se escucharían?»… Recrea con imágenes, sonidos y movimientos a los tres Einstein.

      La segunda fase del modelado corresponde a sustraer las características, rasgos o habilidades que quieres modelar de esa persona. Para ello, identificas qué es natural en el comportamiento del modelo y qué es accidental. Lo natural es lo que no necesita reflexión alguna, el sujeto lo hace sin pensar; lo segundo es el comportamiento que corresponde a una situación especial.

      Sitúa al personaje en un contexto. ¿Cómo se comportaría? ¿Cuál sería su comportamiento natural y cuál su accidental? En el ejemplo de Albert Einstein, imagínalo dando una conferencia… ¿Cómo se mueve? ¿Cómo mira a la concurrencia? ¿Cómo habla? ¿Cómo procesa la información? Observa todo de él.

      En esta fase aún estás como espectador, sólo viendo, escuchando y sintiendo. En la última, la de incorporación, te asocias con el personaje, ahora tú tienes esas características y te comportas como él.

      Aquí es importante que te preguntes lo siguiente: «¿Qué sentiré cuando consiga ser el personaje que modelo?», «¿Qué veré?», «¿Qué escucharé?», «¿Cuál es el resultado que deseo alcanzar?», «¿Cómo comprobaré que estoy en buen camino de lograr-

      lo?», «¿Qué efectos positivos observaré en mi persona cuando incorpore las características del personaje?», «¿Qué nuevos recursos mentales tendré?».

      Recuerda: muévete como el personaje elegido, habla y mira como él lo haría, incorpora todas sus características a tu personalidad; así, verás, escucharás y sentirás el mundo de otra forma, descubrirás cosas que habías pasado por alto y alcanzarás el éxito.

      Modelar es tener un gran abanico de posibilidades para que logres el cambio. El modelado utilizando la fisiología es una técnica muy poderosa para que logres lo que desees en muy poco tiempo.

      Te habrás dado cuenta de que es mejor modelar a una persona optimista que a una pesimista. El primero te dará una postura de poder, de salud, prosperidad y éxito. Lo que diferencia al optimista del pesimista no son las cosas que les suceden, sino la manera en que cada uno de ellos interpreta lo que le sucede y cómo cada uno de ellos sabe manejar sus sentimientos ante ello. El optimista tiene sin duda un mayor grado de control sobre sus sentimientos que el pesimista.

      Existe una manera de adoptar siempre una postura positiva: sé agradecido. Agradece por todo, dale gracias a la vida, a los que te rodean, los que conviven contigo e incluso a los que están en desacuerdo contigo: aunque no lo creas, te han enseñado muchas cosas, agradéceles por ello. Agradece para dejar fluir energía positiva en todo tu cuerpo. La gratitud reenfoca tu vida, hace que tengas nuevos objetivos.

      Recuerda que otra conducta que te permitirá tener una postura de éxito es la risa. Aprende a reír, ya que la risa es un excelente terapeuta; además, cuando eres capaz de no tomar tan en serio tus problemas, puedes solucionarlos, ya que no los verás como «imposibles de arreglar». Inténtalo, verás una gran mejoría.

      Utiliza la risa como terapia. Renta un par de películas cómicas, consigue un buen libro con muchos chistes, asiste a eventos de comediantes, disfruta de la risa, es la mejor terapia contra la infelicidad. Incluso ya existe un movimiento psicológico cuyo objetivo es curar mediante la risa: lo llaman risoterapia.

      Si una persona tiene un excelente sentido del humor logra muchas cosas. Conozco a varias con esas características; además de ser felices, aparentan menos edad, tienen un buen empleo y en las fiestas son el centro de atención.

      Aprende a reírte sin importar lo que piensen los demás, verás que tu salud mejora y la felicidad aumenta.

      Una paciente que estaba enferma de cáncer y que se había curado me dijo que parte de su curación se debía a una «terapia de risa», como ella la llamaba. En los seis meses posteriores al diagnóstico de la enfermedad, se dedicó a ver películas cómicas, asistió a diversos eventos donde el humor estaba presente e investigó nuevos chistes a diario. Estas actividades lograron un gran cambio en su vida, mejorando la salud en su cuerpo enfermo.

      Notas

      1 Haciendo referencia a la oración Gestalt.

      2 En la terapia Gestalt se retoman algunos conceptos del psicoanálisis, sólo que en el «aquí y ahora». En este caso, se maneja un mecanismo de defensa: la proyección de sus sentimientos.

      Конец ознакомительного фрагмента.

      Текст предоставлен ООО «ЛитРес».

      Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.

      Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.

/9j/4AAQSkZJRgABAgEBLAEsAAD/4RlyRXhpZgAASUkqAAgAAAAOAAABAwABAAAARBUAAAEBAwAB AAAA+woAAAIBAwAEAAAAtgAAAAMBAwABAAAAAQAAAAYBAwABAAAABQAAABIBAwABAAAAAQAAABUB AwABAAAABAAAABoBBQABAAAAvgAAABsBBQABAAAAxgAAABwBAwABAAAAAQAAACg СКАЧАТЬ