Irresistible. Andy Stanley
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Название: Irresistible

Автор: Andy Stanley

Издательство: Bookwire

Жанр: Религия: прочее

Серия:

isbn: 9781646910854

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СКАЧАТЬ los jefes de los sacerdotes y los fariseos convocaron una reunión del Consejo. —¿Qué vamos a hacer? —dijeron—. Este hombre está haciendo muchas señales milagrosas. Si lo dejamos seguir así, todos van a creer en él, y vendrán los romanos y acabarán con nuestro lugar sagrado, e incluso con nuestra nación.4

      Cuarenta años más tarde, eso que temían fue exactamente lo que sucedió. Los romanos destruyeron el lugar sagrado y la nación de Israel. Hablaremos de eso más adelante.

      Al final, los líderes religiosos fueron capaces de fabricar un delito. Jesús fue hallado culpable de mala teología y amenazas terroristas contra el templo. Pilato se unió a la farsa para mantener feliz a la gente que mantenía al pueblo contento. Esto no tuvo nada que ver con justicia. No se había cometido ningún crimen. Al analizar el pasado cuidadosamente, entre el caos y la rapidísima serie de acontecimientos que llevaron a su crucifixión, queda abundantemente claro que Jesús fue arrestado y crucificado porque era demasiado popular. Fue crucificado por atraer a tan grande multitud. Por atraer polos opuestos. Porque era difícil de resistir. Porque era imposible de olvidar. ¿Por qué? Porque él ofrecía algo nuevo. Algo completamente nuevo.

      Pero lo nuevo rara vez va bien con los grupos cuyas fortunas dependen de lo antiguo. Aquellos que se benefician mayormente del statu quo, están menos inclinados a recibir el cambio.

      El giro inesperado en esta trama fue la crucifixión de Jesús. Porque parecía el final, pero en realidad marcó un inicio. Su muerte inició eso nuevo de lo que Él había hablado a lo largo de su ministerio público, lo nuevo que anunciaron los profetas del Antiguo Testamento y aún previsto desde el Génesis. Lo que los enemigos de Jesús no sabían —no tenían forma de saberlo— fue que, al acabar con la vida de Jesús, aunque parecía su final feliz, no fue el final que ellos habían imaginado. Su muerte y resurrección iniciaron una cadena de eventos que a la larga marcaría el fin del antiguo judaísmo, así como al Imperio romano en su forma actual, el mismo imperio responsable por su muerte.

      EL MOVIMIENTO DE JESÚS

      No fue sino hasta después de la resurrección, que los seguidores de Jesús comenzaron a comprender que Él no vino simplemente para agregar otro capítulo a la historia de Israel. Jesús no había venido a presentar una versión mejorada del judaísmo. Su movimiento no estaba limitado a una región. El movimiento de Jesús fue para todos sin excepción. Para todas las naciones. Sus seguidores afirmaron que Él fue el sacrificio final por el pecado, eliminando así la necesidad del templo judío. Pero no solo del templo judío. Algo así como veinte años después de la resurrección, el apóstol Pablo confrontaría a los líderes civiles en Atenas y declararía que sus templos eran innecesarios también.5 En el mismo discurso, Pablo calificó a quienes adoraban cualquier tipo de ídolos mitológicos como ignorantes. Como un padre, esperando a que su hijo dejara su etapa más infantil, Dios había esperado e ignorado la idolatría por un tiempo.6 Pero ahora, el mundo debía madurar y reconocer al Dios viviente de todos los pueblos.

      Sobra decir que el movimiento de Jesús entró inmediatamente en conflicto tanto con la cultura judía como con la cultura romana y con razón. Porque Jesús afirmaba ser el cumplimiento del judaísmo por lo cual el judaísmo ya no era necesario. Además, Jesús se declaraba el reemplazo legítimo de la falsa religión grecorromana.

      Jesús era vino nuevo. El judaísmo y la religión grecorromana eran los odres viejos. Lo nuevo que Jesús ofrecía se alejaba de las tradiciones de ambos. Jesús, junto con sus primeros seguidores, declaraban que tanto el judaísmo como el paganismo eran el preámbulo que anunciaba un día futuro donde Dios comenzaría algo nuevo en el mundo para su beneficio. Aquellos que tuvieran ojos para ver lo reconocerían. Aquellos con oídos para oír lo escucharían y le seguirían.

      Específicamente, Jesús vino a establecer un nuevo pacto, un nuevo mandamiento y un nuevo movimiento. El nuevo movimiento sería internacional. El nuevo pacto cumpliría y reemplazaría los sistemas basados en conducta y sacrificios reflejados en casi toda religión del mundo antiguo. Su nuevo mandamiento serviría como la ética de conducta gobernante para los miembros de su nuevo movimiento.

      Lo nuevo que Jesús introdujo, contrastó con los valores y costumbres tanto del imperio como del templo. El imperio asumía la ley del más fuerte. Y mientras Roma se adjudicaba el derecho a crear todas las reglas, los que mantenían el templo estaban comprometidos a proteger sus propias reglas a toda costa. Aunque el Imperio romano y el templo judío eran dos mundos aparte, dentro de cada uno había valores y supuestos que los mantenían unidos, creando un formidable obstáculo para el cristianismo del primer siglo. Que la iglesia haya sobrevivido a ambos es un testimonio del poder del evangelio y del valor de los cristianos en estos primeros dos siglos.

      La iglesia del primer siglo soportó la presión de adoptar e integrar las corrientes del imperio y del templo a su nueva fe. Esto es testimonio de cuán incompatibles eran ambas con la iglesia. Lo nuevo que Jesús introdujo permaneció en crudo, descarado y nada ambiguo, en contraste con los valores y supuestos, tanto del imperio como del templo. Aquellos que estaban más cerca de Jesús comprendieron este contraste. Los recuentos de los Evangelios subrayan e ilustran las diferencias. El apóstol Pablo criticó duramente a aquellos que intentaron integrar el pensamiento del imperio y del templo en lo nuevo que Jesús introdujo.

      Por casi trescientos años, la iglesia eludió la presión de integrar e incorporar las normas antiguas. Pero con la conversión de Constantino el Grande y la firma del Edicto de Milán, la iglesia vivió una transición: de ser una minoría perseguida se convirtió en la mayoría empoderada. Casi inmediatamente, esa resistencia que habían tenido fue reemplazada por la adopción, integración e incorporación de lo antiguo.

      LA REFORMA

      No fue sino hasta el siglo XVI que los reformadores dedicarían su vida (y en ocasiones, darían su vida misma) para liberar a la iglesia de los valores, la cultura y el estilo del imperio y del templo. Para muchos, el nacimiento del protestantismo indicaba el resurgimiento de lo nuevo que Jesús introdujo. Pero la lucha no terminó ahí. La tentación de verter el vino nuevo de lo que Jesús ofrece en los odres viejos del templo y del imperio, sigue con nosotros hasta hoy. Cada generación necesita reformadores humanamente imperfectos. Hombres y mujeres que, como el apóstol Pablo, se mortifiquen cuando vean algún trazo de las antiguas tradiciones filtrándose sigilosamente en lo nuevo que Jesús introdujo.

      Estoy convencido que es la mezcla, la combinación y la integración de lo antiguo con lo nuevo lo que hace que la sociedad de hoy se resista a la iglesia moderna. Es la mezcla, la combinación y la integración de lo antiguo con lo nuevo la que hace nuestra fe, algo indefendible en esta era de desinformación. Jesús nos advirtió hace dos mil años lo que pasaría al verter el vino nuevo en odres viejos. Al final, tanto el vino como el odre se arruinan.7 El resultado es un desastre.

      “Pastor Stanley, ¿por qué no todos van a la iglesia en su país?”

      Para comprender la singularidad del mensaje, el movimiento y la ética de Jesús, debemos primero comprender lo antiguo con lo que se estaba contrastando. Para enfatizar este contraste, es necesario que hagamos un viaje al pasado y veamos una famosa historia de la Biblia.

       Capítulo 2

      ALCANCE GLOBAL

      Israel no era la meta final y más importante de la historia. El antiguo Israel fue un medio para un fin.

      Eso СКАЧАТЬ