Название: Una introducción a la crítica textual del Nuevo Testamento
Автор: Ernst Walder
Издательство: Bookwire
Жанр: Религия: прочее
isbn: 9786124252495
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12. Uso práctico del aparato crítico
Introducción
Se denomina crítica textual del Nuevo Testamento (NT) al trabajo de comparación de los distintos manuscritos con textos del NT que fueron encontrados a lo largo de los últimos siglos. No se trata de una crítica del texto en el sentido de emitir una opinión sobre si es verídico o no su contenido, sino de ver qué manuscritos contienen cierta palabra, versículo o pasaje y cuáles no.
Es importante abordar el tema de la crítica textual porque hoy en día aparecen versiones del NT que, por ejemplo, omiten versos que de costumbre solían ser parte del texto, como es el caso de la Nueva Versión Internacional (NVI), que omite Hch 8.37. En otras ocasiones, se incluye un verso o un pasaje y se comenta en una nota de pie de página que ese texto no se encuentra en los manuscritos más antiguos. Por ejemplo, el caso de 1Jn 5.7 en Reina Valera 1995 (RV95). Estos hechos pueden hacer que el lector acostumbrado a una determinada versión dude de la autenticidad del texto y, por ende, de la veracidad de la “Palabra de Dios”.
También es importante este tema porque en realidad no se ha encontrado ningún autógrafo (texto original escrito por el autor), pues todos los manuscritos son copias; algunas de mucha antigüedad, pero la mayoría de siglos tardíos de la Edad Media. Las copias existentes varían entre sí y no son idénticas.
Al emprender la crítica textual nos enfocamos, en primer lugar, en el origen y la historia de la transmisión del texto del NT. En segundo lugar, evaluamos el aparato crítico,[1] ya que éste solamente es el resultado del proceso de crítica textual y es una herramienta para tener más claridad en cuanto a esta pregunta: ¿Cuál habrá sido el texto original (autógrafo), el que escribió el autor de la carta o del evangelio? Para emprender la crítica textual se parte del texto escrito y existente en los diferentes manuscritos del NT, pero no se entra al debate sobre el proceso anterior a la redacción del primer texto, del autógrafo. No se consideran ni el proceso oral ni el de posibles o probables textos sueltos y previos a la versión del autógrafo.
En este trabajo, al texto tal como fue escrito por su autor originalmente, se lo llamará “autógrafo”, y “copias” a las reproducciones de este texto original, pero reconociendo que cada copia era un original también hasta la invención de la imprenta, porque antes cada una tenía que hacerse a mano, por lo que no había dos copias idénticas.
Cabe mencionar que algunos de los códices mencionados en este libro se encuentran digitalizados y disponibles en los siguientes enlaces:
• Códice Vaticano:
https://digi.vatlib.it/view/MSS_Vat.gr.1209
• Códice Alejandrino (Biblioteca Británica):
http://www.bl.uk/manuscripts/Viewer.aspx?ref=royal_ms_1_d_viii_f001v
• Códice Sinaítico:
http://www.codex-sinaiticus.net/en/manuscript.aspx
• Códice Efrén (Biblioteca Nacional de Francia):
http://gallica.bnf.fr/ark:/12148/btv1b8470433r/f1.item.zoom
[1] El “aparato crítico” es la información que aparece en la parte inferior de las páginas del Nuevo Testamento griego. Ella evalúa el valor de los manuscritos para la lectura de las diferentes variantes.
Aspectos en cuanto al material y a las copias en la antigüedad
El material sobre el cual se escribía
Se puede escribir sobre cualquier superficie estable, como tablillas de arcilla (del tipo de las que se encontró en Ebla o Amarna), paredes (como las de las tumbas de los faraones egipcios), piedras, huesos, metales, vajilla, piel (tatuaje), papel, etc.
Todos estos materiales pueden ser interesantes, pero para el estudio de los manuscritos del NT, los dos tipos de materiales más relevantes son el papiro y el pergamino. Un determinado material puede darnos algunas indicaciones sobre la edad del manuscrito, ya que no siempre y no en todos los lugares del mundo se usó el mismo material.
El papiro
Papiro (Cyperus papyrus) es el nombre de una planta acuática que crecía muy bien en el suelo poco profundo a lo largo del río Nilo y en algunos otros lugares alrededor del mar Mediterráneo (Siria, Noreste de África). Es de fácil cultivo y crece tanto en pleno sol como en la penumbra. Es capaz de crecer entre 2 a 5 metros de altura, y el tallo cilíndrico puede alcanzar un grosor de 8 centímetros. Se utilizaba para fabricar sandalias, cuerdas, ropas interiores, esteras y, sobre todo, papiro, que era el material sobre el que se escribía. La raíz también se podía usar para preparar medicinas y perfumes.
Los egipcios fueron los únicos que comercializaron el papiro como material de escritura. Para la fabricación de esta base sobre la cual escribir, se cortaba el tallo en pedazos de aproximadamente 30 centímetros de largo, y de estos pedazos se sacaban tiras finas, de 8 × 30 centímetros. Se las tomaba y se las colocaba horizontalmente una al lado de otra, teniendo en cuenta que todos los nervios de las tiras iban en la misma dirección. Sobre esta primera capa se ponía otra capa con las tiras en forma vertical. Luego se prensaban las dos capas. La sabia de las tiras actuaba como pegamento. La resistencia de estas láminas dobles era muy parecida a la del papel. Al final se frotaba el papiro suavemente y quedaba listo para ser usado.
Se escribía mayormente sobre el lado de las fibras horizontales, que es el anverso, porque servían como líneas de guía y, además, no presentaban irregularidades. Muy pocas veces se usaba también el reverso, el lado del papiro donde las fibras corrían en dirección vertical, pues al escribir horizontalmente se producían muchas irregularidades. Según la calidad, se diferenciaba entre diferentes categorías de papiro.
Hasta aproximadamente el año 100 a. C., cuando empezó a aparecer el pergamino, se usaba exclusivamente el papiro como material de base para la escritura, y se pueden encontrar manuscritos escritos sobre papiro que datan de hasta el siglo VII d. C.
El pergamino
El pergamino es un material de base para escribir hecho a partir de pieles de animales, como terneros, cabras, ovejas o antílopes. Dado que la piel originalmente tenía pelo, debía ser procesada para eliminarlo. Cuanto más joven era el animal, tanto más fino resultaba el pergamino. Algunos eruditos especifican que al pergamino más fino se lo llamaba “vellum”, aunque esto es un asunto debatible. La piel era sometida a un proceso de limpieza, tanto químico (baño de cal) como físico (raspado con cuchillo y frotado con el polvo de una piedra que servía para suavizar y alisar la superficie).
El nombre de este material proviene de la ciudad de Pérgamo, en la costa del mar Egeo (hoy Turquía). СКАЧАТЬ