España Verde. País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia. Dominique Sellier
Чтение книги онлайн.

Читать онлайн книгу España Verde. País Vasco, Cantabria, Asturias y Galicia - Dominique Sellier страница 33

СКАЧАТЬ target="_blank" rel="nofollow" href="#fb3_img_img_50f970e1-850f-5ed4-b450-15e12b0dae26.png" alt=""/> En Galicia se puede degustar el tetilla, un queso de leche de vaca cuya forma evoca el pecho de una mujer, el San Simón de Villalba, un queso ahumado con forma de peonza, y el cebreiro, queso blanco que se suele comer con una loncha de pasta de membrillo. En Asturias encontrará hasta cuarenta variedades de quesos, entre ellos el famoso queso azul de Cabrales, envuelto en hojas de castaño. Elaborado con una mezcla de leche de vaca y oveja, envejece de dos a seis meses en cuevas naturales en los Picos de Europa. El mejor es el que está elaborado con leche del verano. En el Museo de la Cueva del Queso de Cabrales le explicarán todo el proceso de elaboración. El requesón también es muy sabroso, y tiene su fiesta en Tapia de Casariego a finales de agosto.

       En Cantabria se pueden probar los quesos de Liébana y el picón Bejes-Tresviso, bastante fuerte y picante.

       En el País Vasco hay que buscar en primer lugar, obviamente, el Idiazábal, elaborado con leche de ovejas de raza latxa y, en menor medida, de raza carranzana. Es un queso de sabor intenso, prensado y sin cocer, con una maduración de no menos de 90 días.

       Frutas y verduras

      En este capítulo hay que probar, por ejemplo, las patatas gallegas, con denominación de origen por supuesto. La patata gallega se reconoce por su forma ovalada o redondeada, con una piel muy fina de color amarillo claro que al cocinarse mantiene una textura firme y cremosa. También tiene fama la patata alavesa, cultivada en las comarcas de la montaña y La Llanada. Otra hortaliza protegida tanto en Galicia como en Asturias es la faba (la judía blanca), que tiene cualidades particulares según la zona de origen y las técnicas de cultivo. Las célebres judías de Tolosa y Gernika son de color granate y se producen de forma artesanal; son usadas en muchas recetas locales y se consumen principalmente en invierno. En estas regiones también podrá encontrar maíz, tomates, espárragos e incluso kiwis, que se recogen en Asturias. Las zonas de la vid y la sidra obligan: hay que probar, si es temporada, la uva y la manzana. Y castañas en otoño. Por otro lado, no hay que olvidar los famosos pimientos de Padrón, pequeños pimientos verdes, algunos muy picantes, que se pueden encontrar durante todo el año y se comen fritos.

       Especialidades gallegas

      Nos centramos en cuatro platos muy característicos.

       El pulpo, a feira o a la gallega. Aunque estos dos nombres se refieren a elaboraciones ligeramente distintas, al final la preparación es la misma. Tradicionalmente, el pulpo se cocina entero en un caldero de cobre durante mucho tiempo, para ablandar su carne (normalmente tres cocciones). Una vez bien cocido, se sirve en una bandeja de madera, cortado en pequeños trozos y aliñado con aceite de oliva, sal y pimentón.

       El lacón con grelos. Consiste en jamón ahumado cocido, acompañado de hojas tiernas de nabo (grelos) y chorizo. Es el plato típico de la época de carnaval.

       El caldo gallego. Se prepara con carne de vacuno, un hueso de jamón, un poco de unto, judías blancas, patatas (cachelos o pataca) y grelos. El pote es similar pero a mayor escala.

       Las empanadas. Están rellenas de diferentes productos: atún, berberechos, tomate, carne, pescado..

       Asturias

       La fabada. Es el plato estrella de esta región. Las fabes (judías blancas) se cuecen y se acompañan con chorizo, morcilla, jamón y tocino. Este acompañamiento se sirve por separado, bajo el nombre de compangu. A partir de esta base se crean variaciones, como las famosas fabes con almejes.

       También puede probar durante su estancia el pastel de maíz con huevo y guindillas, el pulpo con patatas, las cebollas rellenas de atún, el filete de merluza a la sidra, el bacalao a la mousseline de ajo, la sopa de cangrejo o la ventresca de atún a la brasa.

       Cantabria

       El cocido. Es un guiso que se puede preparar de formas diversas: el cocido montañés (con judías blancas y col) o el cocido liebanés (con garbanzos).

       Pruebe también el sorropotún, una cazuela de atún con tomates y patatas, o la olla ferroviaria, un guiso de carne magra cocida en vino blanco con puerros y zanahorias, ajo, cebollas, laurel y guindilla verde. Y, de nuevo, empanadas.

       País Vasco

       El bacalao al ajoarriero. El bacalao se cocina a fuego lento, con una mezcla de tomate, ajo, pimientos y aceite de oliva.

       El bacalao al pil pil. Similar al anterior, no debe faltarle una guindilla roja o verde. Se sirve en una cazuelilla de terracota.

       El bacalao a la vizcaína. Su particularidad es la salsa vizcaína elaborada con pimientos de espelette, dientes de ajo, tomates y pan.

       El marmitako. Literalmente significa «de la olla» en euskera. Es un guiso a base de bonito del norte que se cuece a fuego lento con patatas, cebollas, pimientos y tomates.

       La merluza en salsa verde. Toda la originalidad y el sabor de este plato reside en su salsa verde, normalmente hecha con ajo, caldo de pescado, un poco de vino blanco y perejil. Hay una variación llamada «a la koxkera» que incorpora almejas a la receta.

       El txangurro a la donostiarra. La carne del centollo se cocina con cebolla, tomate y puerro; se gratina en el horno y se sirve abierto en canal.

       Postres

       Galicia es conocida por sus postres a base de almendras, como los almendrados de Allariz. Pero, sobre todo, por su muy emblemática tarta de Santiago, originariamente elaborada para los peregrinos de paso. Espolvoreada con azúcar, ahora lleva la marca de la cruz porque un pastelero de Santiago de Compostela decidió, en 1924, decorar СКАЧАТЬ