Pedro Casciaro. Rafael Fiol Mateos
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Название: Pedro Casciaro

Автор: Rafael Fiol Mateos

Издательство: Bookwire

Жанр: Документальная литература

Серия: Libros sobre el Opus Dei

isbn: 9788432152313

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СКАЧАТЬ Jesús eucarístico y decidió tomar una resolución: como la Escuela de Arquitectura quedaba relativamente cerca de la academia DYA, «me comprometí gustoso a ir tantas veces como pudiera para hacer un poco de oración delante del Sagrario, y también a comenzar la costumbre de “asaltar” Sagrarios»[29]. Seguramente fue ese el día —según contaba después— en que san Josemaría le enseñó la oración de la comunión espiritual, que desde entonces recitó a menudo[30].

      Con el tiempo, Pedro fue profundizando en la devoción de san Josemaría a Jesús sacramentado y pudo comprender mejor su inmenso gozo cuando el obispo le concedió aquella autorización. Daba gracias a Dios por esa gran lección, por haberle confiado esa noticia y por haberla vivido tan de cerca: el primer sagrario de un centro del Opus Dei.

      UN ABRIGO MUY ELEGANTE

      Pedro tenía esta virtud, porque se volcaba en una atención activa a los demás. Tendremos ocasión de recordar muchos ejemplos de este rasgo de su personalidad. Por el momento, puede servir como botón de muestra esta anécdota de su juventud que relata su hermano José María:

      VERANO EN LOS HOYOS

      sentía que “aquello” era para mí una vocación de por vida, que llenaba plenamente mis ideales de vivir cerca de Dios y de hacer apostolado; ideales que, por otra parte, no había sentido hasta conocer al Padre y frecuentar el centro de Ferraz.

      Recuerdo que releía con frecuencia y a solas en mi cuarto de Los Hoyos los números de Noticias; los contestaba escribiendo largas cartas y, a medida que pasaban las semanas en Torrevieja —muy divertidas, pero sin hallar a mi alrededor eco alguno a mis inquietudes— sentía mayor deseo de volver a ver al Padre y a mis amigos de Ferraz y hallarme de nuevo en aquel ambiente.

      La semilla de la universalidad [de la Obra] ya estaba germinando [en mí en aquel verano], porque recuerdo que contemplaba con rara nostalgia los vapores que zarpaban del puerto, cargados de sal y con rumbo a países para mí desconocidos. Al mismo tiempo me preguntaba cómo llegarían a ser compatibles las exigencias de la familia y de mi futura profesión con el deseo de participar de alguna manera en la expansión de aquella inquietud apostólica, que las conversaciones con el Padre habían sembrado en mi alma (...).

      Las cartas del Padre y de los demás amigos de DYA influyeron en su vida espiritual: le daban nuevas fuerzas para perseverar en la oración y para aprovechar el tiempo. Junto a las actividades de descanso mencionadas, Pedro seguía —aunque con poca constancia— con sus prácticas de piedad habituales, con el estudio —al que dedicaba algunos ratos— y con la atención a los demás. Esos meses fueron dando su fruto: Pedro comenzó a preguntarse acerca del sentido de su vida y sobre los planes que Dios habría previsto para él.

      [1] R. PEREIRA SOMOZA, Pedro Casciaro Ramírez, op. cit., p. 212.

      [2] J. C. MARTÍN DE LA HOZ, Mons. Pedro Casciaro Ramírez, en SetD 10 (2016), p. 98.

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