Название: #Manifestante
Автор: Álvaro Acevedo
Издательство: Bookwire
Жанр: Социология
isbn: 9789585188167
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El propósito del investigador es realizar una descripción del fenómeno, y a partir de ella, lograr interpretar las acciones humanas. Para esto, debe ir más allá de la lectura de los actos físicos desarrollados por el grupo social estudiado, pues estos corresponden a un contexto específico en el que los sujetos poseen razones particulares para hacer lo que hacen. Es por esto que Miguel Martínez argumenta:
El acto en sí no es algo humano; lo que lo hace humano es la intención que lo anima, el significado que tiene para el actor, el propósito que alberga, la meta que persigue; en una palabra, la función que desempeña en la estructura de su personalidad y en el grupo humano en que vive 13.
Los estudios sociales requieren que el investigador construya una imagen del grupo en estudio –para el caso la UIS y la UN– con el propósito de comprender el proceso de movilización estudiantil en el año 2011. Respecto a la etnografía, Miguel Martínez escribe:
Es un proceso dirigido hacia el descubrimiento de muchas historias y relatos idiosincrásicos, pero importantes, contados por personas reales, sobre eventos reales, en forma real y natural. Este enfoque trata de presentar episodios que son porciones de vida documentados con un lenguaje natural y que representan lo más fielmente posible cómo siente la gente, qué sabe, cómo lo conoce y cuáles son sus creencias, percepciones y modos de ver y entender14.
Siguiendo a Martínez15, el proceso de investigación se lleva a cabo teniendo en cuenta tres puntos fundamentales. En primer lugar, se determina el nivel de participación tanto del actor clave como del investigador. La participación del actor clave se da en la construcción de conocimiento, es decir, es entendido como sujeto cognoscente, quien a partir de sus procesos propios de interacción en los planos socio-cultural y personal-vivencial, construye su subjetividad. En cuanto al investigador, su participación es activa en la fase narrativa e interpretativa del estudio.
Otro punto relevante en esta investigación es construir el esquema de preguntas teniendo en cuenta que la información recolectada da razón de los significados de las conductas de los sujetos entrevistados. Finalmente, se procura un nivel de objetividad realizando una cuidadosa selección de los sujetos participantes; el criterio de inclusión se basa fundamentalmente en líderes del movimiento de las dos universidades, por ende, el muestreo utilizado es por conveniencia. De esta manera, se busca que los resultados del proceso investigativo sean confiables y tengan validez. Para los asuntos de confiabilidad interna se procura la rigurosidad metodológica: se especifica cada paso dado en el proceso, además de precisar el instrumento de recolección de información y el método de análisis. Asimismo, se construye un referente conceptual que enriquezca la comprensión del fenómeno de la movilización ocurrido en el año 2011 en Colombia.
De otra parte, la validez de la investigación debe ser también de carácter interno y externo. Cuando el investigador logra observar, apreciar la realidad y no se desvía del asunto que le compete, se conoce como validez interna. Para obtenerla, se trazan objetivos claros y a partir de ellos, se construyen categorías generales de análisis. Frente a la validez externa, esta se logra cuando el investigador consigue determinar qué tanto la realidad que estudia ofrece conclusiones que se aplican a grupos similares; para ello, los resultados del proceso de investigación serán publicados en diversos espacios académicos para futuros procesos investigativos.
Según Gregorio Rodríguez16, las etapas que integran el estudio de la investigación cualitativa son cuatro: la fase preparatoria tiene dos momentos importantes, uno reflexivo y otro de diseño. En el reflexivo, a partir de la identificación del tema a investigar se busca la mayor información posible sobre el mismo desde una perspectiva amplia y sin llegar a adoptar posturas teóricas. Esta fase permite al investigador identificar las categorías núcleo, teniendo en cuenta sus objetivos. En el momento del diseño se involucran las actividades relacionadas con la construcción y validación de los métodos de recolección de información, la identificación de las fuentes de información y los niveles de participación. Ahora, lo que respecta a la fase de trabajo de campo, se accede de manera progresiva a los actores. Entre las actividades que componen esta fase se encuentra la identificación de los actores clave, la ambientación con los mismos para recolectar datos y la aplicación del instrumento.
En la fase analítica se realizan las actividades que comprenden la disposición de los datos, su reducción y transformación, considerando estos como insumos relevantes para el análisis de los resultados. Se acude entonces a realizar la categorización de las percepciones de los sujetos entrevistados, la transcripción de las entrevistas, su crítica y depuración, usando como herramienta el programa Atlas Ti. Finalmente, en la fase informativa se hace un mayor énfasis en la producción de resultados de acuerdo con los objetivos planteados. Se realizan actividades relacionadas con la producción escrita a partir de las categorías obtenidas y de los análisis particulares de los investigadores. Por último, en la fase de imputación se construyen los relatos basándose en las entrevistas de las personas que han decidido relatar sus vivencias; esto hace que los personajes que cuentan las historias sean reales, pero a la vez pueden ser recreados. Los personajes pertenecen a lo que ha ocurrido pero los acontecimientos reconstruidos ya no se fijan a una realidad sino a múltiples puntos de vista de la realidad. Son personajes y acontecimientos “claves”, “típicos”, constituidos mediante el proceso de amasar la realidad, darle una nueva forma según el contenido descubierto17. Estos relatos son condensaciones y recreaciones del acontecer –en este caso de la coyuntura de la protesta social del año 2011– y expresan iniciativas, formas de pensar y actitudes de miles de jóvenes universitarios en Colombia. El propósito es entonces brindarle voz a una mayoría que repercute en las formas de vivir y que ha sido expresada por referentes típicos. Es por esta razón que ninguna vida individual, ningún personaje contiene todo lo necesario; se hace necesario reinventarlos, completar su esencia y realidad, imputándole las acciones de los hechos.
Por último, se busca profundizar en nuevas formas de movilización y protesta, las cuales están caracterizadas por el rechazo a la violencia y las formas de manifestación poco propositivas. Los estudiantes universitarios que se movilizan en el año 2011 en Colombia implementan nuevas acciones colectivas entre las que se destacan los carnavales, las maratones de besos, abrazos y desnudos como alternativas para acercar a la población ajena a la causa estudiantil de echar abajo el proyecto gubernamental de reforma a la educación superior, y así convertir la manifestación en una ruptura de la cotidianidad a partir de la inclusión lúdica y cultural y no desde una topología de violencia y temor.
Este análisis ha sido posible con el apoyo de la Vicerrectoría de Investigación y Extensión de la Universidad Industrial de Santander por medio de la realización de la investigación titulada ¿Colombia indignada? Estudiantes y movilización social por la educación superior (2011-2012), código 1761, dirigida por el profesor Álvaro Acevedo Tarazona. Igualmente, en el marco de dos investigaciones más que dan continuidad a esta obra: Estado de excepción, conspiración y represión en Bucaramanga, financiada por la VIE-UIS, código 2400, y El ocaso de la utopía antisistémica: el conflicto, la universidad y la apuesta por la paz en Colombia, financiada por Minciencias y la UIS, código 8262. Su realización ha estado a cargo del Grupo de Investigación Políticas, Sociabilidades y Representaciones Histórico-Educativas (PSORHE), en particular por el historiador Andrés Correa Lugos, y del Grupo de Investigación en Población, Ambiente y Desarrollo (G-PAD), en particular por la profesora Raquel Méndez Villamizar, el profesor Héctor Mauricio Rojas Betancur y la trabajadora social Johana Linares García. Sea el momento de agradecer a las personas que accedieron a contar sus experiencias en la Mane. También se reconoce un especial agradecimiento a Gimena Gutiérrez Martínez y Yuly Andrea Mejía Jerez por su valiosa colaboración en el proceso СКАЧАТЬ