Название: Economía española y del País Valenciano
Автор: Autores Varios
Издательство: Bookwire
Жанр: Социология
Серия: Educació. Sèrie Materials
isbn: 9788437082837
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El bienestar subjetivo de los individuos está positiva e íntimamente relacionado con la felicidad, calidad de vida y satisfacción. El estudio de las causas y los factores relacionados con la felicidad humana ha recibido un creciente interés por parte de economistas, psicólogos y científicos sociales en general, en los últimos años.3 El concepto de felicidad o bienestar es multidimensional puesto que abarca un amplio conjunto de factores interrelacionados que afectan a la percepción intrínseca de los individuos. Por ello la felicidad o bienestar excede la estricta consideración del nivel de renta y otras condiciones materiales de los individuos. Por lo tanto, la aproximación a una medición precisa de la felicidad debe incluir indicadores objetivos así como indicadores subjetivos, por ejemplo, los recogidos mediante encuestas a los ciudadanos que valoren sus percepciones.
La evaluación/medición del bienestar subjetivo es de gran importancia desde el punto de vista de la política económica. En primer lugar, a pesar de que existen indicadores objetivos sobre el nivel de renta de una persona, vivienda, salud, relaciones sociales, etc., no existe ninguna regla unánimemente aceptada para combinar toda esta información y que permita valorar el nivel de bienestar global. En segundo lugar, las medidas de bienestar subjetivo, en particular el nivel de satisfacción global, están relacionadas con los indicadores del grado en el que las necesidades de la población están cubiertas en estos países.
Uno de los resultados más destacados y controvertidos de la literatura económica se conoce como la paradoja de Easterlin (1974). Dicha paradoja está relacionada con la evidencia de que el notable aumento de la renta real en los países occidentales desde la segunda mitad del siglo XX no se ha traducido en aumentos de los niveles de felicidad de sus ciudadanos (medidos a partir de encuestas sociales). Algunos autores (por ejemplo, Lane, 2001) justifican la aparente paradoja argumentando que, una vez un individuo sobrepasa el nivel de subsistencia, factores como la amistad y la calidad de la vida familiar sustituyen progresivamente a la renta como principales fuentes de aumento del bienestar. De este modo, en los países desarrollados el crecimiento de la renta per cápita no implicaría aumentos paralelos del nivel de bienestar. Como consecuencia, la felicidad agregada se ha mantenido constante a lo largo del tiempo a pesar de los fuertes aumentos en renta real per cápita.
Estudios microeconómicos más recientes que vinculan el nivel y la evolución de la renta per cápita y el estatus en el mercado de trabajo con la felicidad destacan también la importancia de dos dimensiones que inciden, en primer lugar, en la posición relativa del individuo respecto a otros grupos en un momento del tiempo, y en segundo lugar, en relación con su propia situación en el pasado.
Por lo tanto, entre los factores que deben considerarse al examinar los determinantes de la felicidad y/o el bienestar total de los individuos se encuentran las condiciones de vida y de trabajo de éstos. Así, entre los múltiples determinantes de la felicidad (sin ánimo de ser exhaustivos) se encuentran los siguientes. Primero, los recursos económicos (renta y riqueza personal), que tienen un efecto positivo, aunque decreciente. Segundo, el estatus en el mercado de trabajo (ocupado, parado, inactivo, etc.), dada la gran importancia que se otorga al trabajo remunerado en las sociedades modernas, tanto como fuente de renta como por su estatus social. Tercero, familia y hogar (disponibilidad de vivienda), puesto que las familias integradas por parejas con hijos alcanzan, como promedio, un nivel de bienestar superior al de parejas sin hijos, solteros y al de familias con un único progenitor.4 Cuarto, vida social (balance vida-trabajo). Quinto, salud y cuidados sociales, dado que en principio, ceteris paribus, la gente con enfermedades crónicas tiene un nivel de satisfacción inferior.5 Sexto, nivel de estudios (conocimiento/formación, estudios y aprendizaje), dado que, generalmente, las personas con mayor nivel de estudios obtienen puestos de trabajo mejores y con mayor remuneración, y además se encuentran mejor capacitados para utilizar sus habilidades y dirigir su vida, lo que les lleva a un mayor nivel de bienestar.
Por último, hay que destacar que también importan factores de «exclusividad» y/o relativos (comparación social), que implican la existencia de categorías excluyentes que existen con relación a otros (que no disponen de estas características) y esto refuerza el sentimiento de felicidad; por ejemplo, buenos puestos de trabajo (frente a otros que disponen de puestos de trabajo precarios), buena educación, buena vivienda, coche de lujo. Relacionado con el efecto de la comparación social, la rutina y la rivalidad tienen un efecto negativo sobre el bienestar de los individuos, dado que las personas se esfuerzan para escalar, pero en ese esfuerzo obligan a otros a escalar más para mantenerse... El resultado final es que todos pierden; por ejemplo, la presión para trabajar horas extra, e incluso fines de semana, para mejorar la situación profesional. No obstante, una situación de poco trabajo y/o esfuerzo tampoco implica mayor felicidad.
La tabla 3.7 ofrece algunos indicadores indirectos de bienestar a partir de la información del Instituto Nacional de Estadística. Entre los aspectos en los que la Comunidad Valenciana se encuentra en peores condiciones con relación al conjunto del Estado, destacan las altas hospitalarias por adicción a las drogas, los detenidos por las fuerzas de seguridad y la delincuencia, los accidentes de trabajo, el porcentaje de hogares con dificultades para llegar a final de mes, los problemas de ruido y contaminación. Entre las condiciones más favorables destacan la menor tasa de mortalidad infantil, la menor incidencia del alcoholismo, los equipamientos e infraestructuras, la mayor capacidad de ahorro de los hogares, así como el porcentaje de hogares que declara no tener problemas. No obstante, habida cuenta de la múltiple dimensión del bienestar/felicidad, probablemente obtendremos una visión más completa del fenómeno cuando se hayan revisado otros capítulos del presente libro.
TABLA 3.7
Indicadores de bienestar (%)
España | Comunidad Valenciana | |
Tasa de mortalidad (por cada 1000 habitantes) (2003) | 9,2 | 9,2 |
Tasas de mortalidad infantil (nacidos vivos que mueren en el primer año de vida por 1.000 nacidos vivos) (1999-2003) | 4,2 | 3,7 |
Altas hospitalarias por síndrome de dependencia del alcohol (por 100.000 habitantes) (2003) | 24,3 | 15,5 |
Altas hospitalarias por adicción a las drogas (por 100.000 habitantes) (2003) | 22,7 | 27,6 |
Detenidos por la Guardia Civil y la Policía Nacional (por 1.000 habitantes) (2003) | 7,8 | 9,5 |
Muertes violentas por suicidio (por 100.000 habitantes) (2003) | 5,3 | 5,4 |
Equipamientos e infraestructuras (kilómetros de autopistas y autovías por 1.000 km2) (2003) | 20,3 | 41,0 |
Accidentes de trabajo (por 100.000 trabajadores expuestos al riesgo) (2003) | 6386,7 | 7054,3 |
Hogares según el grado de dificultad para llegar a final de mes (IVTRI-2005) | ||
con mucha dificultad | 10,1 | 12,0 |
con dificultad | СКАЧАТЬ