Название: ¿Campesinos, indígenas y migrantes?
Автор: Julieta Martínez Cuero
Издательство: Bookwire
Жанр: Социология
isbn: 9786077116301
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FUENTE: elaboración propia.
En la ilustración 3 hacemos notar que el concepto de modo de producción surge de una realidad compleja y heterogénea en la que existe un amplia plurifuncionalidad y jerarquía de distintas estructuras que determinan su funcionamiento. Al centro se encuentran los elementos contenidos en la infraestructura y al exterior la superestructura. Las flechas indican la relación no mecánica y no lineal entre la infraestructura y la superestructura. De acuerdo con Castaingts (2012), el estudio de diversas estructuras exige analizar no las diferencias sino las condiciones semejantes, considerando que el objetivo final debe ser la comprensión de lo general y lo esencial, más allá de lo aparente y de lo diverso. Esto conduce a que en el análisis se identifiquen plenamente las relaciones de producción en las que cada sociedad impone especificaciones muy importantes, debido a que entre la estructura y la superestructura existe una serie de determinaciones que se hallan de una forma compleja y única.
Finalmente, en el esquema de la ilustración número 4 apuntamos a la articulación y/o confrontación de los modos de producción, fundamentalmente entre modos de producción capitalista y no capitalista. En la confrontación de distintas lógicas económicas surgen repercusiones en el desarrollo de las fuerzas productivas y en las relaciones sociales de producción, tanto para el modo de producción capitalista como para el modo no capitalista. Asimismo, se fijan relaciones de intercambio y se crean mecanismos de subordinación. En relación con las contradicciones que resultan de la confrontación, se establece la hipótesis de que es justo en la confrontación donde surgen los mecanismos de explotación del modo de producción dominante capitalista sobre el resto.
ILUSTRACIÓN 4
ESQUEMA MODELO DE ARTICULACIÓN/
FORMACIÓN SOCIOECONÓMICA
FUENTE: elaboración propia.
IMPORTANCIA Y OPERATIVIDAD
DEL CONCEPTO MODO DE PRODUCCIÓN
La comprensión y asimilación del concepto de modo de producción resulta ser fundamental no sólo para interpretar la estructura socioeconómica de las comunidades indígenas, sino también para entender las contradicciones que surgen de la confrontación de distintos modos de producción. La manera de hacer operativo nuestro instrumento analítico parte del examen de cada uno de los elementos de la infraestructura, reuniendo para cada caso todos los elementos que conforman y dan especificidad a determinado modo de producción. La operatividad de esta categoría conduce a un análisis diacrónico y sincrónico, considerando que los elementos de la infraestructura se transforman o se eliminan con el paso del tiempo, dando lugar a distintos modos de producción y a diferentes grados de articulación.
A través del concepto de modo de producción y siguiendo el método dialéctico marxista se ponen al descubierto las relaciones sociales de producción que conducen a especificar el modo de producción dominante en cada uno de los tres casos de estudio: San Juan Chamula, San Pedro Polhó y San Cristóbal de Las Casas. En este apartado se definen como punto de partida los modos de producción capitalista y no capitalista. Es importante señalar que en ninguno de los tres casos de estudio se habla de sociedades homogéneas con un único modo de producción, pues se reconoce la heterogeneidad estructural de la región de estudio. Asimismo, se rechaza la idea de establecer modos de producción estáticos y aislados.
La aplicación del concepto modo de producción como instrumento analítico no reside en su adecuación formal y estricta sino, más bien en su construcción mediante el estudio de las estructuras sociales específicas. Dicho de otro modo, el instrumento analítico aplicado en la presente investigación no corresponde a una categoría teórica preestablecida y estática en la que el fin sea introducir datos de manera forzosa. Por último, cabe señalar que la comprensión y asimilación del concepto de modo de producción resulta ser fundamental no solamente en la especificación de los modos de producción dominantes en cada una de las unidades de análisis, sino que además reside en la comprensión de las contradicciones que surgen de la confrontación de distintos modos de producción.
En relación con estudios anteriores, la novedad de nuestro análisis se encuentra no sólo en establecer la coexistencia de distintos modos de producción en un mismo tiempo y espacio, sino también en dar cuenta de los nuevos escenarios en los que coexisten y se transforman. En esta dirección, cabe subrayar que la operatividad del concepto no se limita a describir las fuerzas productivas con las que cuenta una sociedad debido a que profundiza en el conocimiento de las funciones de las relaciones sociales de producción. Estas funciones son el conjunto articulado de tres elementos: control y acceso a las fuerzas productivas, sistema de organización del trabajo y los mecanismos de distribución de los frutos del trabajo. Es a través de las funciones de las relaciones sociales que intervienen en el proceso productivo que se advierte la dinámica de los modos de producción.
Finalmente, conviene señalar que la realidad es compleja y, por lo tanto, no existen claros y oscuros en los modos de producción. Sin embargo, por cuestiones metodológicas y prácticas a continuación se definen como puntos de partida los modos de producción capitalista y no capitalista empleando el concepto modo de producción como categoría teórica.
OPERADORES LÓGICOS EN LA ESPECIFICACIÓN DE LOS MODOS DE PRODUCCIÓN
Mediante los elementos que conforman el instrumento analítico se especifica al modo de producción dominante en cada caso de estudio, pues por medio del análisis de las relaciones sociales de producción se advierte la forma en la que los miembros de determinada sociedad se organizan y se relacionan en el proceso productivo. El objetivo es identificar los elementos de la infraestructura, la jerarquía y la plurifuncionalidad de las estructuras en cada modo de producción. La operatividad inicia con el examen de cada uno de los elementos de la infraestructura enunciados por Godelier (1964). El análisis se centra en las distintas relaciones sociales de producción y en la relación entre la estructura de las fuerzas productivas y las estructuras social, política y religiosa. En concreto, se atiende el esquema de la ilustración número 1 y se conjuga con la número 3, ambos esquemas descritos anteriormente. La operatividad de esta categoría conduce a un análisis diacrónico y sincrónico de los diferentes estadios de los modos de producción y de los distintos grados de articulación al advertir que los elementos de la infraestructura se transforman o se eliminan con el paso del tiempo.
Castaingts (1979) especifica los modos de producción en México a partir del examen de las relaciones sociales de producción ligadas a las fuerzas productivas. Analiza los elementos de la infraestructura, en concreto aquellos que intervienen en las funciones de las relaciones sociales de producción: las clases sociales, las estructuras de parentesco, las representaciones mentales, la cultura y la estructura política (Castaingts, 1979:25-137). El autor distingue un modo de producción de otro por el tipo de relaciones de producción y fuerzas productivas que contiene cada uno de éstos y considerando la estructura jerárquica de causalidad en la que se articulan las distintas relaciones sociales de producción con las fuerzas productivas.
Con el objetivo de clarificar el salto teórico y metodológico entre la discusión de los años setenta del siglo pasado y el planteamiento de la problemática a tratar en la presente investigación, se integra a la definición del modo de producción capitalista la categoría teórica “patrón de acumulación”. De acuerdo con Valenzuela (1990), el patrón de acumulación se dirige a explicar una determinada forma de funcionamiento del sistema económico, СКАЧАТЬ