Название: Manual completo del método pilates
Автор: Rael Isacowitz
Издательство: Bookwire
Жанр: Сделай Сам
Серия: Pilates
isbn: 9788499106298
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A pesar de la extensión, complejidad y alcance del método Pilates, tres principios se mantienen inalterables. Yo los denomino principios supremos, pautas con las que iniciar de por vida un camino de exploración del Pilates. Tal vez, a medida que se realicen nuevos estudios de investigación y se defina una terminología más moderna, cambie la forma de definir ciertos elementos del trabajo y de describir los movimientos. Pero no son más que palabras o el glosario del sistema. La filosofía comprendida en estos principios nunca cambia, porque estamos hablando de la esencia del sistema.
1.Coordinar con precisión el cuerpo, la mente y el espíritu. Este objetivo es la fuerza rectora del método: integrar en cada ejercicio el equilibrio de cuerpo, mente y espíritu. Tal como escribió Pilates en Retorno a la vida a través de la contrología, la obtención de este equilibrio «se manifiesta en una postura perfecta». Si se ignora este principio y no se integra en el trabajo físico, se experimentará que el cuerpo carece de esta energía vital. A pesar de que el cuerpo, la mente y el espíritu mantienen una relación en continuo cambio, estos componentes están siempre presentes a lo largo de la vida. Practicando Pilates nos hacemos conscientes de esta interrelación. Encontrar su equilibrio es el trabajo de toda una vida.
2.Alcanzar el ritmo natural interno asociado a todas las actividades subconscientes. El nivel más alto de aprendizaje motor que se puede alcanzar es aquel en que se practica la acción hasta que la realizamos de manera subconsciente. Esto no significa que la realicemos sin concentración ni conciencia; al contrario, a medida que el patrón de movimiento se imprime en la memoria muscular, se vuelve intuitivo y entonces es posible centrarse en perfeccionarlo, en vez de invertir nuestras fuerzas en aprender la acción en sí. La maestría no se alcanza en poco tiempo; es el premio a un entrenamiento regular durante un largo período, en ocasiones años. En su libro The Outliers, Malcolm Gladwell pone en duda el «principio de las diez mil horas», según el cual una persona necesita esas horas de práctica para dominar una destreza, sea cual fuere. Además de paciencia y resistencia física, dicha práctica exige disciplina y compromiso a todo nivel. Es este tipo de dedicación a la práctica del Pilates la que posibilita el dominio del sistema y la obtención final de bienestar. Tal como Pilates escribió en Retorno a la vida a través de la contrología, «Ejecutados correctamente y perfeccionados hasta el punto de la reacción subconsciente, estos ejercicios dotarán de elegancia y equilibrio a tus actividades diarias» (pág. 63).
3.Aplicar las leyes naturales de la vida al día a día. Pilates era un gran admirador de la naturaleza y del reino animal. A menudo escribía sobre la elegancia y la eficacia de los movimientos de los animales, a los que en lo relativo a la movilidad y el desarrollo muscular consideraba mucho más evolucionados que los humanos. Muchos de los males y dolencias actuales de los humanos son consecuencia de haber perdido la conexión con las leyes naturales de la vida. Sentarse frente al ordenador durante horas, mirar la televisión aún más horas, comer muy por encima de nuestras necesidades (a menudo comida poco sana), conducir y andar poco son algunos de los cambios que han afectado al estilo de vida en las últimas décadas. En Tu salud, Pilates escribió: «En su ansia de perfección y de progreso material, el hombre ha arrumbado por completo la más compleja y maravillosa Creación: ¡el hombre mismo!». Es mucho lo que podemos aprender de la observación de los animales: sus movimientos, sus instintos y hábitos. He aprendido mucho observando a mi perrito Shiloh. Practica el estiramiento de la columna cientos de veces al día, por lo general haciendo lo que los practicantes de Pilates llaman la «Bisagra» («El perro mirando hacia abajo» en la terminología del yoga), y no hay duda de que a pesar de su naturaleza bulliciosa sabe relajarse.
Para desarrollar al máximo en todos los ámbitos de la vida nuestros talentos dentro de nuestras posibilidades, debemos esforzarnos de manera constante por conseguir cuerpos fuertes y sanos, y por desarrollar la mente hasta el límite de nuestra capacidad.
Joseph H. Pilates, Retorno a la vida
a través de la contrología
Los diez principios del movimiento
Si los principios supremos constituyen el alma del sistema, los diez principios del movimiento que he identificado gracias a mi experiencia personal son su personalidad y su carácter. Provienen de los tres principios supremos y están estrechamente vinculados con la filosofía que los vertebra. Tanto durante el aprendizaje como durante la ejecución de los ejercicios, los practicantes de Pilates deben acordarse siempre de esos principios del movimiento. Todos y cada uno de los principios del movimiento se aplican en todos los ejercicios de este libro y deberán integrarse en las prácticas. Constituyen la base de este sistema corporal y mental, y sirven para guiar a los profesores y alumnos hacia el conocimiento, la maestría y el bienestar.
La búsqueda de la conciencia es un viaje interminable; por eso el Pilates es tan interesante, intrigante y gratificante.
Principio 1: La conciencia corporal
El primer paso por el maravilloso mundo del Pilates, y todos los pasos posteriores, debe darse con conciencia y atención. En los movimientos se debe actuar con el cuerpo y la mente. En algunas modalidades de acondicionamiento físico, el entorno parece concebido para disociar el cuerpo de la mente: música alta, pantallas de televisión, ordenadores integrados en las máquinas de entrenamiento y otras mil distracciones. El Pilates se practica en un entorno que estimula y refuerza la conexión entre cuerpo y mente, comenzando por la conciencia corporal.
Nadie es capaz de abordar el proceso de realineación del cuerpo sin ser consciente de su estructura ni de cómo se mueve. Para mí es habitual decirle al alumno cuya pierna no está recta: «Por favor, estira la pierna del todo», y que su respuesta sea: «Pero si está recta» (aunque sea evidente que no lo está). Otras veces ajusto la postura de la cabeza para que se asiente sobre la línea media del cuerpo y su respuesta es: «La noto inclinada». Con el paso del tiempo nos acostumbramos a las desalineaciones, y cuanto menos consciente de ellas sea una persona, mayores serán, hasta sentir centrada una parte del cuerpo que no lo está, o sentir que una extremidad flexionada está extendida. Adquirir conciencia del cuerpo y de la complejidad del movimiento permite establecer las bases para el cambio. Sin conciencia corporal, es poco lo que se puede hacer.
El equilibrio actúa como escala interna de la vida: dinámica y siempre cambiante. el Pilates ofrece una vía para alcanzar el equilibrio.
Principio 2: Hallar el equilibrio
El término equilibrio tiene varios significados. Puede referirse a componentes de la condición física, como la fuerza y la flexibilidad, y también al acto de mantenerse en pie sobre una sola pierna, o a la simetría del cuerpo. Sirve además para describir si un programa de Pilates está bien concebido, y si en una misma sesión los ejercicios se distribuyen de manera proporcional para ejercitar las distintas partes del cuerpo (un aspecto importante del Pilates). Debido a que el método se centra en la región abdominal, en ocasiones los programas de Pilates recalcan demasiado el trabajo abdominal, en especial en su flexión hacia delante, lo cual es un error. Es necesario establecer un equilibrio en el trabajo de los distintos grupos musculares, así como en el de los distintos planos de movimiento. A veces el término equilibrio también se refiere al bienestar general de un individuo, y al equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu. Hay que esforzarse por alcanzar СКАЧАТЬ